1. El gimnasio del placer


    Fecha: 02/01/2024, Categorías: Infidelidad Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos

    Relato anterior "Preñada en Las Vegas por mi esposo ¿o mi suegro?", dejo el enlace al final del relato.
    
    Mi vida había cambiado, ahora era madre de un hermoso bebé, al que todos chuleaban, decían que estaba hermoso que parecía bebé de comercial de tv o revista y me sentía orgullosa, me gustaba presumirlo, sin embargo, estaba inconforme con mi cuerpo, pensé que automáticamente que naciera el bebé, recuperaría la figura, pero no fue así, tenía unos 10 u 11 kg. de más, a los siete meses del nacimiento del bebé lo desteté y empecé una dieta, salí a caminar en las tardes con la carriola del bebé y la ayuda de mi empleada doméstica, quien también se desempeñaba como nana.
    
    Un par de meses más tarde había perdido unos 5 kg, pero todavía no alcanzaba mi peso ideal y sentía que necesitaba tener más firmeza y tonalidad en mis músculos.
    
    Se avecinaba el bautizo del bebé, el cual se realizaría al cumplir el año y quería estar despampanante, así que me inscribí a un gimnasio cerca de mi casa, era un gimnasio pequeño, pero con lo suficiente para lo que requería, sólo quería un poco de cardio, lo que es spinning, bicicleta fija, cinta para correr, step, remo, mi intención sólo era bajar de peso y tonificar mis músculos, a fin de volver a tener el cuerpo delgado y firme de siempre y ese culito redondo y respingado que tanta admiración causaba.
    
    Muy temprano en las mañanas y en las tardes estaba muy concurrido, pero después de las 9 de la mañana estaba siempre casi vacío, así que ...
    ... empecé a ir cada tercer día alrededor de las 10 u 11 de la mañana, a esa hora tampoco estaban los instructores, ya que normalmente solamente acudían en las tardes, pero el encargado me dijo que él era también instructor y podía apoyarme en lo que necesitara.
    
    Después me enteré de que el encargado, Don Diego, era también el propietario del gimnasio, un señor maduro de piel morena apiñonada, de pelo entrecano y complexión muy atlética, musculoso y varonil, alto, alrededor de 1.80 de estatura y unos 45 años de edad, desde el primer día, me impactó, cuando me dio la mano después de inscribirme me apretó la mano con firmeza y seguridad y sentí que mi corazón empezó a latir con fuerza.
    
    Pronto me di cuenta que efectivamente apoyaba como instructor a los pocos asistentes en el horario que asistía y en ocasiones aprovechaba también para hacer ejercicio como uno más de los clientes, mientras hacía ejercicio no le quitaba los ojos de encima desde mi bicicleta de spinning o caminadora y siempre terminaba con mi coñito húmedo, me encantaba ver su cuerpo musculoso y varonil haciendo ejercicio.
    
    Poco a poco fuimos haciendo amistad, además de guapo y varonil, era gracioso y siempre me sacaba alguna sonrisa, buen conversador, siempre tenía algo interesante que decir.
    
    Al cabo de un par de meses, había perdido otros 5 kilos y había recuperado la figura, nuevamente tenía un cuerpo espectacular y me di cuenta que a Don Diego no le resultaba indiferente, a través de los espejos lo descubrí ...
«1234...8»