La Kiosquera
Fecha: 06/01/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... había tenido un novio hasta hacía 1 año, que era motero y que lo único bueno que tenía era su moto. Ese comentario me dejó entre anonadado y perplejo. Menudo gilipollas debía de ser aquel tío por dejar escapar semejante monumento. Mis comentarios giraron en torno a lo tonto que había sido él por dejarla, pero que quizás fuera mejor porque así ella aún podía disfrutar las cosas buenas que tenía la vida. En fin, la conversación fue desviándose hacia temas más personales y el efecto del vino que habíamos pedido estaba empezando a hacer los efectos que todos conocemos.
Una vez concluída la cena, nos dirigimos de nuevo hacia el centro donde nos esperaba una noche de copas por los locales de la zona.
En el primer local donde entramos y tras quitarse ella su abrigo fue el centro de atención de todos los hombres del lugar. No la quitaban ojo de encima, no se muy bien si por su culo, pos sus tremendísimas tetas o por todo en general. Yo me sentía el Rey del local. Tenía conmigo a la mujer seguramente más deseada de cuantas estaban allí. Tomamos un par de copas y nos dirigimos a otro. En todos pasaba más o menos lo mismo. Incluso algunas chicas también la miraban y comentaban entre ellas.
Transcurrida la noche y en vista de que yo tampoco quería que estuviera toda la noche sin pegar ojo, ya que tenía que trabajar al día siguiente me ofrecí a llevarla a casa. Llegamos a su casa, nos bajamos del coche y la acompañé hasta su portal, abrió la puerta y fuimos hasta el ascensor. ...
... Éste llegó, nos dimos las buenas noches agradeciendo la compañía y la diversión y nos dimos un beso en la mejilla. Yo ahí no pude controlarme más y la agarré de la cintura acercándola hacia mi. La besé con una furia y pasión descontrolada. Llevaba toda la noche deseando probar esos labios, mis manos se volvieron locas. De su cintura bajaron hasta su culo. Dios Mío qué culo!!!! Simplemente perfecto!! Esos pantalones eran como guantes, que perfección de formas. Abrí el abrigó y me tiré en busca de sus pechos, que grandes y redondos, que blandos. Tenía que verlos, que tenerlos en mis manos sin tela de por medio. Subí su camiseta, subí el sujetador y por fín aparecieron esas dos montañas de carne. Que ansia por devorarlos!!! Sus gemidos eran terribles. Estábamos en su portal a las 6 de la mañana, yo comiéndole las tetas y ella magreando mi polla a través del pantalón!! En vista de cómo se estaban poniendo la situación me hizo una proposición que llevaba esperando oír desde que fui a buscarla aunque para ser sinceros, era algo que deseaba oír desde el día que la conocí. Subamos a mi casa!!! Creo que no tardamos ni 2 minutos en estar en su casa. Ni que decir tiene que la velocidad en quitarnos la ropa fue algo increíble.
Me llevo a su dormitorio y me tiró en la cama. Ella se quedó de pie sólo con su tanga puesto, un tanga de leopardo!!!. Se veía como esas actrices americanas de cine porno tan espectaculares que de verdad crees que no existen??. Pues esta no, esta existe y es de ...