1. La mejor cita con mi dentista.


    Fecha: 17/02/2024, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... usualmente lo hacía.
    
    Me vi de nuevo forzado a regresar a la conciencia de mi mortalidad cuando el vehículo paró en la calle donde se encontraba mi hogar, me levanté, le di las gracias al conductor y bajé del autobús camino a mi casa. En el tramo saqué mis llaves, y volví a tener el pensamiento del bus, ahora imaginé a mi dentista dándome el placer que tanto me hace falta, visualicé sus manos con guantes azules puestas sobre mi, dándome un buen tratamiento alternativo contra el dolor de muela.
    
    Llegado a mi casa, entre rápidamente dejando mi mochila sobre mi escritorio. Decidí tomar algo para el dolor, no encontré nada más que un miserable paracetamol, el cual ingerí con la esperanza de recibir un mejor tratamiento más tarde. Me bañé rápido, omitiendo mi rutinario “liberador de estrés”, comiendo después, con dificultad, una galleta para calmar el sonido de mi estómago mientras me vestía con ropa limpia. Poco a poco mi día mejoraba de cierta forma, el bañarse y ponerse ropa limpia es ciertamente algo que recarga un poco mis baterías.
    
    Me vestí un tanto distinto a lo usual, la imagen de unos guantes azules desabotonando mi camisa me animó a vestir una prenda olvidada, mi pantalón fue uno de mezclilla, siguiendo mi pequeño ritual con mis medias y zapatos, finalizando con la aplicación de mi colonia favorita. Llamé un taxi ya que faltaba menos de media hora para mi cita, este llegó rápidamente.
    
    Me senté en el asiento de atrás, tratando de digerir el día que había tenido ...
    ... y recordando una vez más mi fantasía con mi dentista.
    
    No mentiré, desde ya hace muchas limpiezas dentales fantaseo con ella, el solo hecho de sentir sus manos tibias en mi rostro es suficiente para querer dejarme llevar. Su nombre es Mónica, calculo que tendrá unos treinta y cinco años, y ciertamente se encuentra en el pico de su atractivo, recuerdo especialmente su culo cuyo tamaño se ve resaltado por ese uniforme que me pone tanto.
    
    Rememoro, además, sus grandes pechos, los cuales estoy seguro de que coloca intencionalmente muy cerca de mí rostro, como si pidiera que me lanzará contra ellos. Sé que Mónica es una mujer casada, he podido observar su anillo dentro de sus guantes, anillo el cual personalmente deseo quitar para liberar por fin esas manos que me vuelven loco, esos dedos finos que deseo adentro mi boca, esas uñas cuidadas que se esconden bajo el nitrilo azul, las cuales quiero apretando mis testículos, observando como el rojo de sus uñas contrasta con lo blanco de mi semen.
    
    Mi erección a través de mi pantalón era evidente, si el taxista hubiera sido una chica sin duda hubiera hecho lo posible para ser notado, y así asegurarme una “entrada” antes del “plato principal”, de todas formas, esto no era posible ya que iba llegar pronto a mi destino.
    
    El dolor nuevamente se hacía notar, pero ahora aliviado un poco por la pastilla. Ya me encontraba en el estacionamiento de la clínica por lo que procedí a pagarle al taxista. Buscando algún billete en las bolsas de ...
«1234...12»