Mi historia con una mujer maltratada (3)
Fecha: 26/02/2024,
Categorías:
Hetero
Autor: Tmy456, Fuente: CuentoRelatos
... mi amor.
—¿E... Eh?
—Date la vuelta.
Parecía que había perdido la consciencia. Normal, después de haber tenido un orgasmo así, no me sorprendía que esté cansada. Por un segundo pensé que se había desmayado.
—¿M... Mi... Mi amor?
—Sí, bebé. Soy yo, Tommy.
—To... Tommy.
—Sí, abrí los ojos, dale. Mi gatita hermosa.
En ese momento comenzó a abrir los ojos lentamente y suspiré internamente.
—¿Qué te pasó, boluda?
—Ahhh, ¿Cuán... Cuánto tiem... Cuánto tiempo estuve así?
—Unos minutos. Entre que fui a buscar una toalla para secarte y volví.
—¿Para… secar qué?
—Tu entrepierna, soltaste una cantidad de líquido bárbaro.
—¿Ehhhh? ¿Tan... Tanto?
En ese instante se toca los muslos y dice:
—Wow, no lo puedo creer.
—...
—Fue uno de los orgasmos más gran… grandes que tuve en mu… mucho tiempo.
—Es que sí. Date la vuelta, dale. Que te termino de secar.
—Dejá, me… me seco... yo sola.
—Ok.
—...
Después de unos minutos, yo me fui a la cocina y me serví un vaso de agua. Dejé que reposara un poco más, volví y le di un poco de agua a ella.
—Perdón si me puse violento, me pasé un poco creo.
—A mí me encanta cuando te pones así de salvaje, que me pongas a cuatro patas como la perra que soy.
Se mordió los labios y me tiró un beso.
—Igual, no tengo porqué tratarte así.
—Bueno, está bien. Te disculpo, mi amor. No pasa nada.
Anen me preguntó a quién prefería, si a Pola, a Lucila, a Briggita o a ella. Le dije que ...
... obviamente ella era ella, que podían venir miles y la iba a seguir prefiriendo por sobre todas las demás. "¿Y vos?" Le pregunté. "¿Yo qué?" repreguntó.
—¿Me seguirías prefiriendo a mí?
—Obvio que sí, bombonazo. Si sos un semental.
Después de dos horas de estar hablando boludeces:
—Escuchame una cosa.
—Decime, mi amor.
—¿A vos te gustaría tener un bebé conmigo?
Ahí pensé que se le había saltado la chaveta.
—¿Me estás jodiendo? Yo empiezo la universidad en un mes casi.
—No. Estoy hablando del futuro, si es que esto perdura.
—Ah, no sé. ¿Qué se yo? ¿Vos qué pensás?
—Yo pienso que el pendejo podría salir muy lindo, no sé... Con mis ojos, tu nariz, mi pelo, mi boca, tu nuca, tus orejas.
—Mirá que tener un pibe es una responsabilidad enorme.
—Ya sé, ya sé. Es sólo que siento que no estoy haciendo nada importante con mi vida.
—¿De qué estás hablando?
—No sé.
—¿Cómo no vas a estar haciendo nada importante con tu vida? Sos locutora y estás por hacer Fisioterapia en la UBA, tenés un departamento para vos sola.
—Es que Micaela, nuestra entrenadora, por ejemplo ya tiene un hijo y tiene un año más que yo.
—Pero eso es porque Mica está preparada para tener uno.
—Sí. Tenés razón.
Se le cayó una lágrima.
—Tranquila amor, tu momento ya va a llegar, tenés que tener paciencia.
—Me quiero quedar con vos siempre, no te voy a dejar ir nunca más, sufrí muchísimo cuando te fuiste por ese mes interminable.
—Bueno, vos tampoco tenés que ...