La primera vez de un heterocurioso
Fecha: 04/03/2024,
Categorías:
Gays
Autor: royfoker, Fuente: CuentoRelatos
... erección comenzó en él, nos miramos, no dijimos nada y lentamente nos acercamos hasta estar al alcance de nuestros brazos.
Como un acto reflejo ambos tomanos nuestros miembros, en ese momento bastante duros, y los manoseamos con cuidado. Fue entre una masturbación novata y exploración técnica.
Estuvimos unos breves minutos así, hasta que él toma un cojín, la pone a mis pies y se arrodilla. Me dice con voz decidida “siempre quise probar esto”, acto seguido posa sus labios sobre mi glande.
Comienza a pasar su lengua desconfiadamente, como quien va tanteando el sabor de una comida nueva, luego mi pene se pierde en su boca lentamente hasta que, sin dudarlo mas y como si tuviera mucha experiencia, veo como esa exploración se convierte en un oral. Mi primer sexo oral recibido de un hombre.
En mi mente no podía procesar lo que veia y sentía. Estaba muy excitado y lo disfrutaba mucho, y su ritmo era tan preciso que intente controlarme para no terminar eyacular en su boca.
Luego de unos minutos le pedí que parara, no quería acabar tan rápido ni ser descortés al no avisar.
Él se reincorpora con una cara de asombro y satisfacción, supongo que la experiencia fue tan gratificando como lo fue para mi.
Me dice que va por un vaso de agua y yo me quedó ahí, estático. A su regreso le comento que quizás deberíamos usar preservativos para evitar posibles accidentes a los cual es accede sin problemas.
Se sienta en la cama mientras se coloca el preservativo y no sé si fue ...
... una indirecta o mera sugestión, pero separó las piernas como invitándome a hacer la siguiente movida. No sé que pasó por mi mente pero, sin pensarlo mucho ocupé el mismo cojín, me arrodille frente su miembro y le devolví el favor. Esa fue la primera vez que le realicé un oral a un hombre.
No sé como explicarlo, hay cierto placer en sentir algo tibio dentro de tu boca pero lo que mas me excitó es ver como él iba reaccionando. Nunca le vi su rostro pero podía oír sus gemidos de placer y mezclados como su confusión.
Pasarón unos minutos y sentía como sus piernas empezaban a tener pequeñas convulsiones, brincos leves que venían acompañados de frases como “ya, dejalo”, “ para”. Quizás debí parar pero, estaba disfrutando ver como gozaba así que seguí unos segundo hasta que sentí un suspiro intenso seguido una extraña sensación en la boca, como si apretara un globo inflado con agua y sintieras como la goma se deforma sobre tu lengua.
Me retiré rápidamente y el se tumbó de espalda. Me dijo “te dije que pararas, por suerte tenía lo tenia puesto”. Yo no dije nada y solo me levante.
Pero logramos algo, romper el hielo.
Él se fue al baño, yo me quedé mirando las cortinas de un ventanal procesando todo lo que había pasado. Si todo terminaba ahí yo me daba por satisfecho.
A su regreso del baño, lo noto mas decidido y me pregunta “¿que quieres hacer ahora?”. Yo me encogí de hombros y le dije que en realidad nunca pensé llegar tan lejos. Él me dice que tiene cosas por probar ...