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El desvirgue de Emma
Fecha: 04/03/2024, Categorías: Transexuales Autor: AnaLiliaTvCDMX, Fuente: CuentoRelatos
Había llovido. Cuando el tío y yo salimos de la plaza en la que se encontraba el cine descubrimos que había caído un diluvio mientras mirábamos la película y que muchas calles se encontraban inundadas. Era de noche y el tránsito estaba congestionado. Decenas de luces rojas se encendían frente a nosotros cada 10 metros y el sonido del claxon de todos los autos podría volver loco hasta al hombre más paciente. - Carajo – le escuché decir al tío. A mí no me importaba el tránsito porque me encontraba sumido en mis propias cavilaciones. Al terminar la película había aprovechado el momento de privacidad que me daba haber entrado al baño para revisar mi teléfono. Julián me había escrito. En sus mensajes decía que no dejaba de pensar en mí y que no podía esperar para tener sexo conmigo. Después de comprobar que había puesto el seguro del cubículo, coloqué mi teléfono sobre el retrete, me bajé el pantalón y comencé a masturbarme mientras leía sus mensajes. En el tiempo record de cinco minutos había metido mis tres dedos por mi ano y masajeé mi pene hasta tener un glorioso orgasmo. Al terminar le escribí a mi futuro novio diciéndole que lo amaba y que yo también deseaba estar con él en la cama. No le dije que acababa de masturbarme en un baño público, pensé que eso podría contárselo después. Cuando salí de los baños mi tío me preguntó si me encontraba bien. - Estás muy rojo – me dijo. - Sí, todo está de maravilla – le respondí. Llegar al departamento del tío nos llevó el ...
... doble de tiempo que nos había tomado llegar al cine, pero ambos estábamos felices de haber librado aquel contratiempo. Al entrar mi tío fue directamente a la habitación en la que yo pasaría la noche y entonces hizo el descubrimiento. Cuando entré a la habitación él se encontraba a un lado de la cama. - Está empapada - me dijo. Cerró la ventana y comenzó a retirar las sábanas que cubrían el colchón. Después de una segunda inspección mi tío comprobó que el agua había mojado por completo la cama y que no era posible que yo durmiera ahí. - Lo siento mucho – me dijo – no pensé que podría pasar esto. Yo le dije que no tenía por qué preocuparse. Yo podía pasar la noche en el sillón y no tendría nada de que quejarme. Él me dijo que no podía permitir eso, iba a usar su cama y él dormiría en el sillón. La “sugerencia” tenía la pinta de una orden y no opuse mayor resistencia, yo iba a dormir en su cama. - ¿Pizza para cenar? – me preguntó y dio por zanjado el conflicto. Una hora después tocaron a la puerta y recibimos nuestra cena. La pizza estuvo acompañada con cervezas. Antes de ofrecerme la primera lata el tío me miró y caviló por unos momentos. - Ya eres mayor, ¿verdad? – me preguntó. Yo reí y le confirmé que ya era mayor de edad. - Bueno, pero no le vayas a decir a tus padres, ¿eh? - Lo prometo – le dije. Cenamos y miramos televisión mientras lo hacíamos. El tío tenía una docena de cervezas en la nevera y después de un par de horas habíamos terminado ...