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Me cogieron vestida de colegiala por una apuesta
Fecha: 06/03/2024, Categorías: Gays Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos
... divertida se ofreció a ayudarme, el sábado llegó, y era hora de pagar la apuesta, por lo que fui al cuarto de mi hermana por la ayuda prometida, no quería ningún vestido provocativo o demasiado corto y a mi hermana se le ocurrió que me pusiera su atuendo escolar, ella ya había terminado la preparatoria y no usaba ese atuendo. Me entregó una falda escolar de cuadros color azul y rojo, una blusa escolar blanca, unas calcetas escolares, un sostén y calzones de mujer, de los llamados cacheteros. Me fui a vestir a mi habitación y aunque no pensaba en principio ponerme los calzones, me excité al tocarlos y quise probar que se sentía, así que me los puse, me encantó la sensación, es mucho más suave que la ropa interior de hombre y se ajusta más al cuerpo, sentía como apretaba mi verga y se metía ligeramente entre mis nalgas y me provocó una erección, el calzón no alcanzaba a cubrir todas mis nalgas, pero no me importó, arriba llevaría la falda y no se notaría, seguí con la falda, aunque mi hermana era más delgada, la cintura era elástica, por lo que se ajustó a mi talla, un pelín ajustada, resaltando mis nalgas, luego vino el sostén, la blusita escolar, amplia para mi hermana, justa para mí, seguí con las calcetas, me sentía raro, perturbado, pero también excitado, esperé unos minutos para que se bajara mi excitación ya que tenía mi miembro durísimo y salí al cuarto de mi hermana, sonrió al verme, y me dijo que me quedaba muy bien la ropa, me prestó una peluca, un collar con ...
... el gafete escolar, no quería que me maquillara, pero mi hermana insistió hasta que acepté a pintarme los labios y un ligero maquillaje en mis mejillas, mi hermana reía divertida diciendo que iba a quedar divina y trayendo unas calcetas me dijo que me las pusiera de relleno del sostén, y por último me roció de su perfume, lo cual me tomó por sorpresa, no hubiera querido oler a mujer, pero ni modo, no la pude detener a tiempo, mi único atuendo masculino fueron mis tenis, ya que mi talla de calzado también es más grande que el de mi hermana, escogí mis tenis blancos escolares de deporte y no desentonaba para nada. Cuando me levanté y me ví al espejo no me pude reconocer, realmente parecía una colegiala, una bella colegiala. Pronto escuché el claxon y tomando aire para darme valor salí, todos mis amigos me chiflaron y lanzaron piropos, observé sus atuendos y me sentí mal, sus atuendos eran mucho menos logrados, habían pedido apoyo al grupo de danza folclórica y llevaban faldas o vestidos largos, trenzas y algunos con un maquillaje exagerado, diría que algo cómico o divertido, ninguno llevaba un atuendo similar al mío, y me dio pena, empezaron las bromas: - Estás buenísima, fiuuuu- me dijo uno de ellos. - No quieres ser mi novia, corazón- agregó otro. - Ya no jodan, cabrones- les dije. - En serio das el gatazo, si no supiera quién eres ya te estaría tirando los perros, ja ja, estás más buena que tu hermana - me señaló otro de mis amigos. Me sentí turbado, pero ...