Si estás en cuatro, tu culo peligra
Fecha: 07/04/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: suruminga, Fuente: CuentoRelatos
... o motos para mover mejor su negocio. Aunque es algo escabroso, por falta de uso, también se puede llegar por tierra, pero hay pocos que conocen ese recorrido, y los más jóvenes, si lo conocieran, seguro preferirían lo más fácil y a la moda”.
No había razón para ocultar mi situación así que le conté todo incluyendo mi deseo de vengarme y luego hacer los trámites de divorcio. Y por eso le pedí dos favores, el primero que mañana, después de dejar el auto, me llevara en su moto al lugar del que habláramos, y el segundo que me prestara el machete que se lo habían hecho usando una hoja de elástico de camión, que no solo tenía un filo excepcional sino que, al ser tan pesado, cortaba en el primer envión.
Media hora después de las nueve, del día siguiente, ya estábamos en un inmejorable puesto de observación y cuando la espera nos estaba carcomiendo vimos aparecer la moto.
Bajaron de la moto tomados de la mano y ascendieron hasta la terraza natural, ambos con chalecos salvavidas, él con slip y una pequeña mochila, y ella con malla enteriza. Yo, oculto a pocos metros, era un privilegiado espectador que, en el silencio ambiente, podía escucharlos perfectamente. Después de tender una toalla grande se sentaron.
- “Este es un lugar que pareciera diseñado por la naturaleza como marco maravilloso para disfrutar al máximo”.
- “Tenés razón, cuando lo contaste creí que exagerabas”.
- “Ayer, con Alba nos faltó tiempo pues solo tuvimos una hora antes de que oscureciera, y ...
... aun así lo disfrutamos”.
- “Ella fue la que me tentó y por eso acepté tu invitación, pero creo que me equivoqué, no debí haber venido pues mi marido no se merece esto”.
- “Puede que sí se lo merezca. Qué te contestó cuando le dijiste que yo te había invitado a conocer este sector de playa?”
- “Me dijo que no le parecía bien, aunque era libre para hacer lo que quisiera. Sus palabras textuales fueron «Podés llegar a encontrarte en una situación que afecte seriamente nuestro matrimonio. Por supuesto a nada te obligo. A mi lado solo te quiero por una elección en total libertad»”.
- “Ves como tengo razón? Para mí que íntimamente, quizá sin saberlo, quiere ser cornudo y por eso no te pone límites”.
- “Es verdad que no me pone límites, pero me lo dijo una vez y de manera bien clara «A mi lado sos dueña de hacer lo que se te ocurra, pero con certeza absoluta no estoy dispuesto a compartirte. Cuando tengas ganas de estar con otro simplemente me lo decís y cada uno sigue su camino sin enojos. Por supuesto informando antes. Si dejás el aviso para después, corrés franco peligro»”.
- “No creo que sea para tanto, solo un imbécil deja suelta a una hembra como vos. De todos modos lo que pueda suceder aquí nadie lo sabrá. Si fue hasta el pueblo a hacer reparar el auto tenemos tranquilamente seis horas antes de que vuelva”.
- “Pero en la cabaña todos se van a dar cuenta”.
- “Sí, pero nadie abrirá la boca porque todos se tapan mutuamente”.
Mientras tenía lugar la ...