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Eliza (1): La madre de mi compañera de universidad
Fecha: 04/05/2024, Categorías: Sexo con Maduras Autor: AMARASHI, Fuente: CuentoRelatos
... frente a mi pene parecía que se le hacía agua la boca y cuando abrió sus labios y se lo empezó a comer yo estaba fascinado, Eliza se comió mi trozo de carne el cual estaba rígido y se lo metió tan adentro como podía. Movía su cabeza hacia atrás y hacia adelante como si no lo hubiese hecho durante mucho tiempo, mostrando su experiencia disfrutaba del sabor a hombre y jugaba al apretar sus labios solo para succionar mi pene cuando salía, tomándose su tiempo para respirar solía lamerlo desde la base hasta la punta. –¡Qué buena... resultaste para esto! –¡Gracias!... Disfrutando el ver como ella lamía mi pene, sus estímulos eran perfectos, rozando mi glande con sus labios pasaba a ser tocado por su lengua mientras llegaba al fondo de su garganta dejando que entrará libremente. Estaba fascinado al compartir mi pene con Eliza y pronto comprendí que ella era una mujer de carácter dominante, pues parecía que se haría todo a su antojo. –Es hora de cambiar y que tú me des placer… –¡Si es lo que deseas! Llegando la hora de cambiar Eliza me empujó sobre la cama, terminando yo recostado ella vino sobre mí y sentándose sobre mi rostro empecé a lamer su húmeda vagina. Escuchando sus gemidos al disfrutar de como chupaba su vagina también devoraba su hinchado clítoris y estirando mis manos apreté sus pezones, mientras ella movía sus caderas en perfectas cadencias al disfrutar de la situación, mi lengua tocaba su mojado y caliente interior aparte de su ...
... clítoris. Hasta que de repente quise sorprenderla y girando hacia un lado hice que ella terminará acostada y al someterla por la fuerza quise demostrarle quien era el hombre, aunque solo era una excusa porque en realidad quería metérsela ya mismo, pero sabía que debía ser paciente. Y al estar en roles invertidos pude demostrarle lo que yo sabía, enterrando mi rostro en su jugosa vagina pasé mi lengua una y otra vez saboreando de su exquisito sabor y llegue a succionar su clítoris tanto como pude. –¡Siii!... Su clítoris estaba siendo estimulado por mi lengua y mientras ella gemía trataba de ahogar un grito de placer provocado por un gran orgasmo, lo cual demostraba que yo en verdad sabía lo que hacía al darle placer. Cuando decidí que ya era suficiente y besando la parte baja de su abdomen fui subiendo, para luego hacer una parada en sus senos los cuales tomé entre mis manos y apreté suavemente antes de rozarlos con mis labios. De uno en uno incluso llegue a juntar ambos senos y devore sus dos pezones al mismo tiempo, incluso los bese y tomándome mi tiempo disfrute de su suavidad y olor a lavanda que me gustaba. Provocando que tuviera una sensación incomparable para mí fue como disfrutar de un exquisito manjar, antes de terminar cara a cara besándonos mientras mi pene rozaba su vagina giramos una vez más y terminó ella sobre mi. Apoyando mis labios contra los suyos metía la lengua dentro de su boca y de pronto mi pene se deslizó hasta el fondo de golpe y vi su ...