1. Esposas desesperadas (parte 1)


    Fecha: 16/05/2024, Categorías: Sexo con Maduras Autor: JORGEFAG, Fuente: CuentoRelatos

    ... de la señora Carmen, también su boca ataco el par de tetas que caían por gravedad directamente a su boca.
    
    La señora Carmen podía sentir claramente cada uno de los frentes, las chupadas alternadas de esa boca desconocida sobre sus pezones y aureolas; el manoseo sobre sus nalgas y la exposición de su culo al viento y sobre todo el estar cayendo de manera directa sobre un poste venoso de carne que la recibía gustoso, acariciando los pliegues de su vagina y llenándola por completo.
    
    La mezcla de estas sensaciones acabó con la señora Carmen, quien empezó a gemir cada vez más y más fuerte, al tiempo que aceleraba el ritmo del movimiento de sus caderas y sus piernas, así como los gruñidos del extraño que cada vez se hacían más intensos.
    
    La panocha de la señora Carmen comenzó a generar fluidos que escurrían como una fuente sobre el tronco del anfitrión, al tiempo que emitía un último gran grito de placer, su cuerpo se ponía rígido y detuvo los movimientos quedando sentada sobre el garrote que estuvo cabalgando.
    
    El extraño, levanto en peso a la señora Carmen, sin dejar de tenerla por las nalgas, abrió estas al viento y dejo salir de su verga una dotación generosa de mecos que impactaron de manera directa en el ojo del culo de ella, quien al sentir el chorro caliente de leche, sintió una última sacudida de electricidad recorriendo su cuerpo.
    
    Finalmente sus piernas no pudieron sostenerla más, cayendo de manera pesada en el sillón, estaba sudorosa, temblorosa, tan ...
    ... excitada que quería experimentar más orgasmos, pero su cuerpo ya no respondía, tal vez por algunos minutos se quedó dormida, porque regreso a la conciencia con un beso en la espalda del incognito anfitrión, quien le dijo en voz baja: en verdad eres una mujer que puede convertirse en la puta más puta, cuando gustes puedes descubrirte los ojos, yo me retiro, que sigas teniendo un feliz cumpleaños, pero tus bragas son mi regalo.
    
    Acto seguido se escuchó azotar la puerta, la señora Carmen se retiró el antifaz, por la falta de costumbre se empezó a adaptar a la iluminación de a poco, empezando a reconocer la habitación, vio el sillón donde había terminado aún empapado de sus jugos, volteo a ver la cama semi destendida con grandes círculos de humedad en las sábanas en diferentes zonas y una pequeña salita donde se encontraba su vestido perfectamente doblado y su sostén, ahora ya sin las bragas que completaban el conjunto.
    
    Se quitó los zapatos y se dirigió a tomar una rápida ducha, al ver su reloj se dio cuenta que era ya casi la hora a la que salía habitualmente, se vistió, se vio al espejo y salió de manera apresurada, abrió el portón automático y salió en su coche, llegando en cuestión de minutos a su casa.
    
    Bajo del carro con los regalos falsos y el auténtico, siendo vista por el marido que la esperaba impaciente: ya es hora de comer, ¿Qué son todos esos arreglos florares?
    
    La señora Carmen contesto con enfado: son regalos que me dieron en el trabajo, por si no lo sabes hoy ...
«12...5678»