¿Por qué nos gusta ir a un club de intercambio?
Fecha: 27/05/2024,
Categorías:
Intercambios
Autor: Edu y Pam, Fuente: CuentoRelatos
La ventaja de disfrutar el lugar es que, con libertad total, damos rienda suelta al deseo y la pasión, a la fantasía compartida, a la alegría, al disfrute. Nos dejamos llevar experiementando momentos intensos de mucho placer, observamos escenas muy candentes, participamos de algunas de ellas, que llegan a ser momentos de mucha sensualidad y sexo en diferentes formas. Disfrutamos de buenos orgasmos, de ver que a otros se les provoque, de ese acercamiento furtivo, de esa tensión y momentos de complicidad mutua y con terceros que nos eleva el grado de exitación en forma superlativa. Nos contamos cosas, nos decimos mucho con sólo vernos a los ojos y el lenguaje corporal. Podemos ser testigos de miradas que se cruzan, parejas que les exita ver y ser vistos, algunas otras personas que, con toda naturalidad, sabiendo que no es problema con su pareja, se dan un taco de ojo observando a otras y otros por igual y donde algunos van más allá en el roce, en la caricia, en la aproximación de otros cuerpos, en ese beso cargado de erotismo, en esa sensación de tener un cuerpo diferente y de vivir el momento.
Hombres y mujeres que se abren a otros, intercambios breves o no tanto, que producen mucha adrenalina y sensaciones únicas al interactuar, estimulaciones y sensaciones con un nuevo conocido que busca, al igual que nosotros, esa experiencia momentanea, al lado de sus acompañantes, sabiendo que al terminar, todo lo que pase sólo sea sexo, y quede para la memoria los momentos brillantes ...
... que, seguramente, alimentarán nuevas fantasias y experiencias. Todo ello hace que ir a algún club de intercambio sea una experiencia grata, que esperamos con exitación.
En esta ocasión, vemos desde un sillón amplio en una de las orillas, un grupo de personas interactuando en las camas centrales. Hay mucha acción en tres parejas que primero cogen con su respectivo acompañante y poco a poco empieza a darse una intercambio con los integrantes de las otras parejas. Primero caricias en los hombros, brazos, cuellos. Besos electrizantes donde los labios rosan apenas otras pieles. Senos que se muestran altivos, pezones erectos y retadores a ser tocados, acariciados, besados, mientras su cuerpo cabalga el pene de su pareja, en clara señal de buscar compartir las sensaciones del momento.
Todo ello sucede a poca distancia de donde estamos abrazados, acariciandonos e intercambiando ocasionales besos entre nosotros, cuando un amigo ya desnudo con una erección en proceso se sienta a tu lado y comienza a pegar su cuerpo al tuyo. Primer su pierna toca ligeramente la tuya, su pie frota brevemente con el tuyo y llama tu atención. Lo miras y volteas buscando hacer contacto visual conmigo, para dejarme ver que alguien ya está junto a ti.
Poco a poco, desliza sus manos y te acaricia, primero tu muslo más próximo, gira su cuerpo hacia tí y él y yo cruzamos miradas, donde me muestra sus intenciones de acaricarte y yo asiento. Tú no quitas la mirada de una pareja que cogen con mucha pasión ...