1. Mi Obseción por las Selfies


    Fecha: 21/10/2018, Categorías: Zoofilia Autor: Key-Q, Fuente: SexoSinTabues

    ... la siguiente imagen. , pero al estar yo retratándome desde atrás y en cuatro patas, el perro al parecerle familiar mi posición se quedó ahí mirándome no tardando en ir a oler mi ya jugosa y mojada vagina. , a lo que reaccioné bajando mi celular y esperando que se fuera para proseguir. , pero este animal al ver que no lo ahuyentaba se tomó la confianza de lengüetearme directamente entre los expuestos labios interiores de mi vagina. , haciéndome dar un chillido de las intensas cosquillas que eso me produjo. Mi reacción luego de ese par de lamidas fue echarme para adelante sentándome de costado en el piso. , y el perro se quedó ahí mirándome mientras me movía la cola. , la percepción de esas cosquillas pese a lo extraño e inesperado me pareció bastante agradable, lo que sumado a que el perro se agachó a oler mi ladeada entrepierna y dichas lengüeteadas hicieron mojarse aún más mi confundida caverna vaginal, volví a levantar mi trasero dejándolo que saboreara mis abundantes fluidos hormonales. , lo que hizo gustoso y ansioso a la vez, pues comenzó a mover más rápido su cola e incrementaba la velocidad y profundidad de sus lamidas. , lo que muy pronto me hizo caer en un sabroso orgasmo no pudiendo controlar los espasmos de mi vientre e inevitablemente llevé mis dedos medio e índice a frotar los costados de mi endurecido clítoris mientras el antebrazo de mi otra mano lo usé para apoyar mi frente. Mi perro se puso tan efusivo y ansioso cuando probó el sabor de mis fluidos, que luego ...
    ... de que prácticamente me penetró con su lengua cuando fue a buscar los jugos que aún estaban al interior de mi vulva, se puso a gemir como un cachorro cuando te pide algo. Y yo estaba tan extasiada que le hablé cariñosamente "¿¿Quéee le passhhaa mi regalón. ??". , lo que pienso tomo como una aceptación a lo que estaba solicitando y se me subió por atrás tomándome de las caderas con sus patas delanteras, haciendo movimiento de coito y tratando de cogerme cual perrita en celo. , a lo que pese a verme sorprendida no reaccioné y me quedé ahí sin importarme si le acertaba a mi sexo o no. , pero luego de puntear un rato en el aire mi perro se me bajó traspasándome toda su ansiedad a mí, pues en ese preciso momento me di cuenta que sí quería que me penetrara. , y estaba totalmente deseosa de albergar un pene en mi vagina por primera vez. , sin importarme que fuera el de él, necesitaba sexo real ahí y en ese mismo instante. , no podía esperar un segundo más. Ya me había apoyado en la palma de mis manos e ideado en mi mente la opción de ponerlo de espaldas y auto encajarme su pene que no tenía idea de cómo era, pues siempre se lo había visto guardado en su funda. , pero antes que saliera de mi posición de cuatro patas se me volvió a montar, agarrándome esta vez por la cintura y punteando muy cerca de mi entrepierna, por lo que me cargué en mi codo izquierdo y con la derecha por entre mis piernas fui a buscar su aparato para ayudarlo a que acertara. , pero antes que diera con él, ya me ...
«1234...14»