Mi suegro me castiga por puta
Fecha: 15/06/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos
... acababa de coger, desde que te cogí en Tampico, me volví loco, soñaba todos los días contigo y estaba deseoso de volver a poseerte, por eso estoy aquí, es falso lo de la entrevista de trabajo, vine a cogerte y me dio mucha rabia que alguien se me había adelantado.
- Mi hijo te ama, eres una puta, pero si se llega a enterar le haría mucho daño y no quiero lastimarlo, tampoco quiero perderte, quiero seguir cogiéndote, me haces gozar como nunca en la vida, prometo callar y ser felices los 4, eso sí, si llegas a salir embarazada, puedes apostar que le voy a realizar pruebas de paternidad al bebé, así que ten cuidado.
Con una mano limpió mis lágrimas y me dio un ardiente beso en los labios.
No lo podía creer, mi secreto estaba a salvo y mi suegro me pedía ser su amante a cambio de su silencio, así que mi reputación estaba a salvo, así como mi matrimonio, al fin pude respirar tranquila, y mi alma regresó a mi cuerpo, busqué sus labios para darle un beso en señal de aprobación y que estaba de acuerdo con el trato.
Mi cuerpo estaba sudoroso y semen escurría entre mis piernas, así que me levanté con dificultad, mis piernas me temblaban, no podía sostenerme, mi suegro me ayudó a llegar a la regadera y procedió a bañarme con cuidado, nada parecido a la bestia de minutos antes, todo parecía indicar que estaba arrepentido de haberme violado, sus grandes manos enjabonaban todo mi cuerpo, incluyendo mis nalgas y mi rajita, cuando me estaba enjabonando las nalgas aprovechó para ...
... tocarme el ano con la punta de su dedo e hice una mueca de dolor, mi culo estaba al rojo vivo.
- Te duele mucho- me dijo con un tono preocupado.
La pregunta me pareció tonta, claro que me dolía, después de la bestial cogida, me dieron ganas de insultarlo, pero me contuve, comprendí que su comportamiento fue producto de los celos y tal vez me lo merecía, así que decidí perdonarlo.
- Si me duele y mucho, pero pronto me recuperaré, no te preocupes, sólo déjame descansar.
Ya no hubo más acción, ya no podía, me dolían todos los músculos de mi cuerpo y mi suegro lo entendió, me ayudó a secarme y me llevó a la cama donde me ayudó a acostarme, no pedí ponerme ropa, era un suplicio hacerlo, así me acosté, desnuda, al lado de mi macho, me acurruqué a su pecho y nos fuimos quedando dormidos, con mi pierna sobre la suya.
No sé cuánto tiempo estuvimos dormidos, cuando en la madrugada sentí que se acercó a mí y besó mi cuello, su verga rozaba mi pierna, la sentí dura, no me moví, fingí seguir dormida, su lengua recorrió mi cuello y encontró mi oreja, y la empezó a lamer, cuando entró su lengua dentro no pude evitar dar un gemido, descubriéndome, me susurró al oído:
- Amor, ¿estás despierta?
Un nuevo gemido fue mi respuesta y lo abracé, busqué sus labios y le dí un beso ardiente, todo parecía haber sido un sueño, o más bien una pesadilla, me encantaba estar así, acurrucados, piel con piel, su fuerte brazo rodeaba mi cuerpo y acariciaba mi espalda, me hacía sentir segura, ...