El desafío de ser amado: padre e hija
Fecha: 23/06/2024,
Categorías:
Incesto
Autor: Lucia22, Fuente: CuentoRelatos
... de repente. Su voz era tranquila pero fuerte y me heló la sangre. "Deja que papá se divierta un poco", dice mientras obliga a mi cuerpo a acostarse y separa mis piernas.
Me quita los shorts y metió sus gruesos dedos callosos en la humedad de mi interior. Dejé escapar un gemido mientras él abría los labios de mi vagina.
"No lo pienses mucho. Voy a hacer que te sientas muy bien, hija", murmura antes de sumergir su rostro en mi entrepierna.
Gemí en respuesta, sintiendo el fuego de la pasión arder en mi interior.Me siento atrapada por su masculinidad, su rudeza y su capacidad para hacerme sentir cosas que nunca había sentido con mi novio. No pude evitar gemir de placer cuando él metió su lengua al mismo tiempo que me tocaba el clítoris.
"Sólo déjate llevar", me dijo mientras continuaba.
Sentí una ola de placer cuando papá comenzó a chupar mi clítoris. Cuando la ola estrelló, sentí cada parte de mi cuerpo temblar.
"Cariño, voy a meterla"
"E-Esta bien, papá."
La forma en que masajeó mis piernas, abriéndome y reclamándome como suya... como si fuera un agujero rogando ser rellenado con su semen, me excitó tanto.
En algún momento, comenzó a empujar la punta de su verga en mi interior. Mi cuerpo se tensó. Luego empujó aún más profundo dentro de mí. Sentí que me estaba tratando de partirme por la mitad. Me metió toda su verga sin cuidado. Sentía lágrimas en los ojos mientras mi corazón se me aceleró.
Sucedió tan rápido. Estaba empujando dentro de mí con ...
... golpes largos y duros, llamándome su "nena" una y otra vez. Mis uñas se clavaron en su espalda, y él gritó empujando más fuerte contra mí. Estábamos en celo como animales. Gimió y se corrió fuerte dentro de mí. Sentí su semen incestuoso corriendo dentro de mí y liberó algo en mí tan primitivo que no pude parar de pedirle más.
"Papá... papá... más..."
Me corrí por segunda vez y nunca he vuelto a sentirme tan bien en mi vida como lo hice en ese momento. El placer carnal de ello quedo grabado a fuego en mi alma.
La perfección de eso que transmuta el vicio en virtud, la dicha de eso. La forma en que su deseo y el mío se unieron en un momento de placer y plenitud. Mi padre, había entrado dentro de mí en ese acto fugaz y efímero, convergían los contrastes y dualidades de la elevación y la caída, la pasión y la razón.
"Papá, más, más fuerte"
Con cada embestida más realizada me sentía. Aunque no sea virgen, su gran circunferencia me estiraba ampliamente. Todavía sobre mi, las bolas de mi padre se estrellaban contra mi delicado trasero. Coloqué mis manos sobre su pecho bañado en sudor.
Mientras gemía le dije:
"Tu verga se siente tan bien, papá. Sigue hasta que todo tu semen esté dentro de mi".
Papá se corrió tanto y tan fuerte que podía sentir como caía bastante por mi entrepierna hasta las sábanas.
Lentamente dejó de bombear. Podía sentir su semen deslizándose fuera de mí. Mis piernas estaban alrededor de su cuerpo y atrayéndolo hacia mí.
Papá se movió, ...