Arturo y Alma (I)
Fecha: 25/06/2024,
Categorías:
Intercambios
Autor: Edu y Pam, Fuente: CuentoRelatos
Ya con varios encuentros entre los cuatro, Arturo y Alma se habían vuelto habituales compañeros nuestros de exitantes aventuras sexuales.
Cómo nos conocimos
Primero tú conociste a Alma en un cafe con otras amigas, y después de un par de citas solo entre ustedes con charlas amenas, se fueron dando las conversaciones subidas de tono donde llegaron a comentarse que si bien cada una tenía compañero como tal, ambas parejas nos identificabamos como practicantes del intercambio, lo que nos abrió perspectivas de intensas experiencias con ellos.
Eso motivó a que en esa tercer cita en el café, el acercamiento entre ustedes dos se diera más, las manos se comenzaran a rozar, la expectativa del momento hiciera efecto, las presencias de ambas, la sensualidad de cada una, el haber hecho click desde el primer día, dio paso a que comenzaran a acariciarse. Un roce descuidado de la mano sobre el cuello de la otra, otra mano que se puso en los hombros de la primera y que bajó por la espalda hacia la cintura, uno que otro beso discreto, miradas de complicidad, que ocasionaron una pasada rápida al baño, donde, después de cerciorarse que estaban solas, se dieron los primeros escarceos amorosos entre las dos y de allí comenzó todo. Ambas sabían que tenían compromisos más tarde, así que a pesar de la exitación del momento, se despidieron y cada una fue para su respectiva casa. Recuerdo bien ese día cuando llegaste toda alebrestada, corriste a abrazarme, a besarme con la intensidad ...
... característica de haber experimentado algo así, y me comentaste lo que había sucedido con Alma. Esa noche, hicimos el amor como locos, nos corrimos intensamente, nos entregamos con pasión desmedida y quedaste de decirme como se iban dando las cosas.
Siguiente ocasión, ella pasó por tí, y en lugar de ir al cafe de las tres citas anteriores, te invitó a su casa donde, estando ya solas las dos, pudieron ir aventurando un poco más las caricias, los besos, los toqueteos, llegando a retirar ambas parte de la ropa de la otra y disfrutar de sus cuerpos, con unas caricias delicadas, de mucha intensidad y gran sensualidad.
Durante esos momentos de pasión, le comentaste que ya me habías dicho de estos encuentros iniciales y ella te mencionó que no le había dado tiempo de explicarle nada aún a Arturo, su pareja. Sabiendo que podría llegar él, Alma te llevó en su auto a nuestra casa a hora prudente, sin dejar de aprovechar en el camino para que ella fuera acariciando tu entrepierna, aprovechando que llevabas un vestido a la rodilla, ya sin ropa interior, jugando con tu clítoris, penetrando tu vagina con sus dedos, hasta arrancarte un orgasmo intenso, más por la sensación de que se fuera dando en plena vía pública, aunque ya tarde. Igual, llegaste a la casa con toda la expectativa de tener una fuerte e intensa sesión de sexo y así sucedió entre nosotros esa noche, provocándonos múltiples orgasmos y saboreando nuestras corridas.
En otra ocasión, unas semanas después, ella te comentó que ya ...