Georgina (37) - Relatos Eróticos

Georgina (37)

... condición de marica sin problemas así como mis hermanos yo pude crecer sin traumas ni complejos, así que cuando debía ingresar a la preparatoria a los 17 años le pedí a mis padres que me inscribieran en una escuela pública... los convencí e ingresé a la "prepa 2" como es lógico de inmediato mi aspecto andrógino y mis amaneramientos llamaron la atención y desde el primer día comenzaron las burlas ahora no podía refugiarme en los maestros así que ahora tenía que valerme por mí misma, gracias a mi aspecto muchas de las chicas del salón me habían "echado el ojo"... así que aprovechando esa circunstancia inmediatamente me integré al grupo de las niñas, afortunadamente tengo mucha facilidad para hacer amistades, así que cuando algún pendejo se quería pasar de listo conmigo inmediatamente mis amigas se le echaban encima para defenderme con el paso del tiempo fui simplemente un alumno más como cualquier otro.

Como siempre estaba con el grupo de chicas de mi clase era común que cuando algunos chicos se acercaban para tratar de ligar con ellas tuvieron que tratarme como una de ellas para no quedar mal... Y fue en esas ocasiones que pude notar que algunos... pocos en realidad me miraban con disimulado interés, pero al principio no le di importancia... hasta que una de las chicas me dijo: viste como te miró David?

- No... Contesté... por qué?

- Dijo: huy Robertito... ese cabrón te comía con la mirada... se me hace que le gustas.

- Contesté: ¡no mames! como crees... si él es ...

... de los que más presume de " macho"

- Respondió: mira pinche Roberto la verdad es que eres muy guapo y he notado que no sólo las chicas voltean a verte, también me he dado cuenta que algunos cabrones te ven con deseo... lástima que seas maricón te juro que yo si te dejaba cogerme me gustas mucho, y la mayoría de las chicas pensamos igual, así que no tiene nada de raro que te le antojes a algunos chicos.

A partir de ese día estuve más atenta... cuando nos reuníamos con los chicos checaba sus rostros y efectivamente, David y otro chavo llamado Pedro me miraban con disimulada insistencia, yo me hacía pendeja como que no me daba cuenta... disimuladamente paraba mis nalguitas y de reojo podía notar sus miradas fijas en mi trasero.

- Interrumpí su relato para preguntar: oye comadre y no te ponían cachonda las miradas fijas en tus nalguitas?

- Contestó: pues en ésa época Yo la verdad no estaba interesada en el sexo... hasta ese momento no había pensado en tener relaciones con alguien, cierto que me gustaban algunos chicos pero no me hacía muchas ilusiones, pero al darme cuenta de las miradas que esos cabrones lanzaban a mis nalguitas despertaron en mí el deseo de estar con un hombre... en fin cuando le comenté a mis amigas que me gustaba David ellas me dijeron que por lo visto yo también le gustaba a él, y me animaron a conquistarlo.

Días después organizamos una fiesta en casa de una de las chicas por su cumpleaños e invitamos a los chicos que nos gustaban, durante la ...