1. ¿Qué será amor y qué lujuria? (3/3)


    Fecha: 30/06/2024, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Chicles, Fuente: CuentoRelatos

    Poco a poco, las prácticas amatorias y las maneras de llevarlas a cabo fueron más ardientes en el matrimonio cuando el amante aparecía de trasfondo o actor secundario. Ella le contaba a su marido, con sumo detalle acompañando la explicación con las caricias hechas o los comentarios dichos, lo mismo hacía con el amante, y cuando se descubrían posiciones nuevas de un lado u otro. Los tres estaban entusiasmados con la idea de convivir una semana dedicados a la lascivia y el amor. El matrimonio cambió la alfombra de la recámara por una más mullida y la cama matrimonial por una kingsize. Añadió una pequeña barra. Compraron un tripié para la cámara de video y acoplaron diversas luces para evitar reflejos cuando filmaran su primer trío. El amante, por su parte, pagó la instalación de un yacusi en lugar de la tina del baño que estaba en la recámara de ellos. El lugar quedó acogedor y a tiempo. Cuando llegaron las vacaciones escolares y los hijos se fueron a la capital con sus abuelos, todo estaba listo para el estrenarlo con sumo placer el primer sábado.
    
    El amante llegó a la hora indicada, llevando un pequeño y delicado arreglo floral para ella y una botella de brandi para él.
    
    —¡Gracias, es mejor de lo que yo conseguí! ¡Bienvenido! —dijo el marido a su socio estrechándole la mano.
    
    —Claro que será bien venido, y nosotros también —dijo ella al tomar el arreglo floral para olerlo, dándole al amante un pico en los labios.
    
    Se sentaron en la sala y brindaron por su amistad. ...
    ... Platicaron algo de los sucesos de la semana y los esposos le pidieron al amante que los acompañara a ver cómo había quedado la recámara y aprovechar para ponerse cómodos antes de regresar a cenar. La mujer fue la primera en ponerse “cómoda” con su traje de placer: se desnudó ante ellos y cada uno prendió su boca a un pezón.
    
    —¡Nada!, desvístanse para ir al comedor, primero debemos alimentarnos bien, así no nos faltarán energías ni proteínas —dijo separándolos por los cabellos de las tetas.
    
    Ya desnudos, ella llevó las fuentes a la mesa y dirigió la oración para dar gracias a Dios por la comida y los básicos que ella recibiría: …“gracias también por la leche carne y huevos que me permites disfrutar. Amén”. La plática inició en torno a la belleza de las tetas de la anfitriona y la queja por haberlos separado de los pezones. Vinieron los chistes que fueron subiendo de tono. Ella había subido una pierna sobre las piernas de cada uno de los otros y frecuentemente se las acariciaban, desde los pies hasta donde les permitían el largo de sus brazos. Al terminar, ella recogió los trastos y los colocó en el fregadero.
    
    —Yo hice la labor correspondiente a mi sexo, ahora a ustedes les toca hacer la propia —dijo señalándoles el fregadero.
    
    —Lo bueno es que hoy tengo ayudante —dijo el cornudo.
    
    —¡Claro!, pero lo haremos en equipo, esa nena va a saber lo que es amar a dos al mismo tiempo. Yo lavo y tú secas —completó el amante.
    
    —Aquí sí, pero en la recámara haremos lo mismo, sea ...
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