Recibiendo visita
Fecha: 19/07/2024,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Edu y Pam, Fuente: CuentoRelatos
Era ya tarde, entraste al cuarto desnuda, hermosa. Yo veía en la tele una pelicula muy erótica, sin ser porno. Te acercaste a la cama y te acostaste a mi lado. Yo también estaba sin ropa, mi pene descansaba de la cogida anterior, lleno de nuestros jugos. Te inclinaste hacia mi semierecto instrumento y lo empezaste a chupar todo, separándote para llegar a mi boca y besarnos intensamente, relamiendo mis labios con tu lengua. Te acercaste a mi boca para darme a probar esos sabores, recorriendo con tu lengua mis labios. Los besos eran muy pasionales e intensos, regresaste dos veces más a él, lamiendo mis testiculos y volviste a mi boca para que tuviera la sensación de nuestros jugos y pudiera saborearlos.
Ya con mi pene nuevamente erecto despues de tus caricias orales, me dijiste que ya estaba listo y te sentaste en él, ensartándote profundamente. Te ves hermosa montando mi pene y me encanta sentir cómo me coges en esa posición.
Entraba todo en ti, y podía sentir tu vagina empapada. Movías tu cadera frotando tu clítoris contra mi cuerpo, lo que sé te provoca sensaciones que te llevan al orgasmo rápidamente, regando con tus jugos mi cuerpo a cada movimiento. Me decías que sintiera tu vagina muy mojada, llenita de semen. Te inclinaste sobre mi poniendo uno de tus pezones en mi boca. Yo abrí mis labios y me pediste que lo probara. Mi lengua lo recorrió y jugó con él. La desplacé a ese erógeno canal entre los dos senos y me puse a lamer el otro pezón. El sabor a semen ...
... dominaba. Me decías que lo habías hecho venirse también allí y que con su verga, aún dura, repartiste su corrida en ambos senos, frotando tus pezones con la punta. Sabes cómo disfruto de chuparte y comerte los senos y este sabor lo hacía más especial.
Mientras, mueves tu cadera y te vas corriendo, empapando mis testiculos y muslos. Te inclinas a besarme con el sabor de tus senos en mi boca y levantas tu cadera, hasta dejar sólo la punta dentro de ti y me dices que viera lo mojadito que sale mi pene de tu vagina. Reluce empapado, era su semen y tus corridas que acababan de suceder en el cuarto de al lado con nuestra visita. Te coges mi verga con intensidad, deseo y pasión, hasta casi hacerme venir en ti, pero quieres que se prolongue el momento y te detienes, aplazando mi corrida.
Se trata de Arturo, un amigo con quien ya hemos tenido intercambios anteriormente junto a su esposa Alma y que se fueron a vivir a Monterrey por cuestiones de trabajo. En esta ocasión tuvo que venir a la ciudad y lo invitamos a que pasara su estancia con nosotros.
Cenamos en un restaurante comida italiana acompañado con un buen vino y luego pasamos a un bar a disfrutar de un par de copas. Allí, aprovechando la música, bailamos brevemente. Alternaste pareja entre Arturo y yo. Cuando llegaron las calmadas, te tocó bailarlas con él, repegando sus cuerpos, haciéndole sentir tus senos hermosos, turgentes y regalándose unos cuantos besos y caricias en la pista aprovechando la intimidad que daba la media ...