Mi historia
Fecha: 23/10/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... entrarán—el solo hizo lo que le dije, aún pensando más me acerqué le dí un último beso, correspondido, y añadí -no mencionemos esto con nadie, luego hablamos ¿va?— le dije al oído, acostado. -está bien—y se empezó a hacer el dormido Para eso empezamos a escuchar que tocaban la puerta, y los típicos amigos que hacen bromas preguntando que si estábamos cogiendo ahí adentro. “Casi, si no hubieran subido a lo mejor sí” pensé yo. Dejé que pasaran unos 2 minutos más y les abrí. Puse mi mejor cara de sueño para que pensaran que también estaba dormido y que solo estábamos ahí para que se nos bajara lo borrachos, pero obvio con la puerta cerrada con seguro, era lo mejor que teníamos, la mejor excusa. Alejandro siguió con la cuartada que quedamos y nos creyeron, después de todo nada iba a pasar si Alejandro era el mujeriego del salón. (Debo agregar que todo ello desde el inicio de los tocamientos pasó en alrededor de 15 minutos). Pregunté la hora, era tarde y Alejandro escuchó. Dijo que ya se tenía que ir alegando que su mamá lo iba a regañar muy seguramente. Como vivimos para el rumbo decidí acompañarlo también, tal vez en el camino hablaríamos sobre lo sucedido. Nos depedimos y partimos. Estuvimos hablando pero sobre lo bien que la pasamos con los amigos y que de verdad a él se le habían pasado las copas, era lo que decía. -Pero ¿entonces no recuerdas nada?—pregunté yo -La verdad no—dijo él con cara de confundido, es decir, con cara de honestidad de que no recordaba nada, creo yo. ...
... -¿Porqué? ¿Cuánto tiempo pasó? -No, por nada, no sabes beber jaja—fue lo único que se me ocurrió decir. Lo dejé en la esquina de su casa, me aparté una cuadra más y saqué las lágrimas. Rompí en llanto por el coraje de lo que había pasado, coraje porque había pasado, coraje porque ni siquiera sabía por qué sentía coraje a ciencia cierta. Es decir ¿Qué pasó? ¿Qué ocurrió conmigo? ¿Qué ocurrió con él? ¿Qué soy? En serio que la pasaba mal, golpeaba postes, lloraba, me preguntaba todo ello ¿Qué iba a pasar con él? ¿Qué iba a pasar conmigo? ¿Qué iba a pasar entre nosotros? ¿Cómo reaccionará mañana? ¿Qué soy?. Llegué a mi casa y tomé un baño, caí rendido a la cama después de un rato de más preguntas internas y unas cuantas lágrimas más. En medio de la noche, estaba soñando y recordando lo que pasó, mi pene estaba aprisionado en el bóxer queriendo salir. Me desperté entre noche a masturbarme recordando más que los tocamientos lo que él me dijo y sus expresiones, me excitaba bastante ello, estaba caliente por no poder terminar hace rato y me vine sin contener el orgasmo, fueron muchas contracciones en el pene, muchos chorros. Después de limpiarme me miré al espejo, no me reconocía, había hecho algo que nunca, y nuevamente me recriminé por ello. Dudas, coraje, incertidumbre, dormí con todo ello nuevamente. Desperté, sin resaca por el alcohol. Me preparé para ir a la escuela, tenía miedo. Seguía cuestionándome, pero no quería pensar en ello. El día en la escuela fue normal, vi a Alejandro ...