1. Mi casa de playa (4)


    Fecha: 19/07/2024, Categorías: Infidelidad Autor: verosoto, Fuente: CuentoRelatos

    Como a eso de las 2 de la tarde de aquel domingo le pedí al jefe de mi esposo, y nuevo amante mío, que se fuera ya que quería reposar y luego ir a la bendita playa a la cual ni un pie había podido acercar. A regañadientes aceptó y fui a darme un nuevo baño, salí en toalla y me senté en el sofá a relajarme y pensar en todas las cosas que me habían pasado en este fin de semana atípico...
    
    Estando con mi mente volando, nuevamente alguien me llama afuera. Era una voz femenina, quién sería esta vez, Dios? Me puse un short, una camiseta corta y salí, encontrándome con una vecina de la casa de enfrente a quien reconocí pues llegó el mismo día que yo con su pareja al pueblo costero, llevaba en sus manos una botella de ginebra y un jugo:
    
    -¡Hola! Espero no molestar… ¿estabas ocupada?
    
    -No para nada, pasa adelante.
    
    Comenzamos a hablar y me pidió dos vasos para servir la ginebra con jugo de naranja. Busqué hielo y nos servimos a nuestro gusto… Me comenzó a contar que estaba feliz porque la habían llamado de su trabajo y le notificaron que le dieron un ascenso y que no pudo contárselo a su marido ya que éste se había ido temprano de pesca, que por eso pensó en salir a festejar y se le ocurrió acercarse a mi casa y ver si estaba disponible.
    
    Me había visto desde el viernes y le parecí una persona agradable y que, aunque desconocida, pues tenía que celebrar y quien mejor que su vecina que, al menos, estaba allí cerca y nunca está de más entablar nuevas amistades. La idea no ...
    ... era mala así que nos instalamos a beber y festejar el ascenso de la chica. Ella era muy bonita, tendría como 28 años, blanca con un cuerpazo de infarto. No tengo problemas en reconocer la belleza de una mujer y, ella, era espectacular además de muy simpática y chistosa.
    
    Bebimos casi toda la botella y me recosté del sofá pues estaba un poco mareada, más no me percaté de que como no llevaba ropa interior el short se había rodado a un lado y se veía parte de mi rajita, rasurada y aún húmeda producto de la reciente ración de buen sexo. Ella miró hacia mis muslos algo sonrojada y me preguntó:
    
    -¿Estás cómoda?
    
    -Sí, hehe -le respondí -algo mareada, no acostumbro beber de esta manera…- ella seguía viendo mi entrepierna y allí si me percaté de que algo pasaba, de inmediato acomodé mi short y le pedí disculpas…
    
    Ella me preguntó el por qué estaba tan húmeda, de inmediato se me ocurrió decirle que estuve viendo una película porno en mi cuarto y recordando a mi esposo (vaya excusa) y ella soltó una carcajada. Le dije que si ella no veía películas de ese género y qué le parecía tan gracioso. Respondió que claro que las veía, muchas veces con su marido o a solas como yo, pero que cuando tocaba el tema con otras amigas le decían que nada que ver, que eso era depravado, o que si necesitaban ver esas porno para excitarse ella y su marido, etc.
    
    Así que lo dejaba hasta ahí para no caer el polémicas, por ello le parecía agradable que coincidiéramos en ese aspecto... Y que se reía ...
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