Por culpa de la pandemia fui la hembra de mi cuñado
Fecha: 31/07/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos
... cumpleaños no se celebra todos los días.
Seguimos charlando, era buen conversador y ocurrente, me hacía reír mucho. El licor y la charla me hacían sentir más relajada y desinhibida, disfrutaba su compañía, era muy caballeroso y me gustaban sus atenciones.
No soy muy asidua a la bebida y pronto me sentí mareada, sin embargo, la estaba pasando tan bien que seguía bebiendo, no sé si era mi idea o no, pero creo que las bebidas que preparaba Carlos estaban muy cargadas de alcohol, de pronto en la plática, expresó:
- Sabes, todos en la familia envidiamos a mi hermano por tener tan bella esposa.
El comentario me ruborizó, no contesté, solamente sonreí sonrojada, pero me encantó el halago.
Carlos cada vez se acercaba más a mí, también estaba bebido y me hablaba muy cerca de mi cara, a unos 30 centímetros a lo mucho, la proximidad de su cuerpo me hacía sentirme un poco nerviosa, mi cuerpo me hormigueaba, un calor extraño me envolvía, y sentía mi vulva extremadamente húmeda, Indudablemente me estaba excitando la presencia de mi cuñado, intentaba seguir la plática, pero ya no recuerdo que tantas cosas decía, creo que empezaba a decir algunas estupideces, solamente recuerdo que reía mucho, la ingesta de tanta bebida hizo efecto y necesitaba ir al baño urgentemente, así que intenté incorporarme y trastabillé con la mesa de centro, afortunadamente Carlos me sostiene de la cintura y evita que caiga de bruces, sentir sus fuertes manos en mi cintura me causó un ...
... estremecimiento que recorrió mi cuerpo, me acompañó al baño, sosteniéndome de su brazo para no perder el equilibrio, a pesar de haber bebido la misma cantidad de alcohol que yo, se notaba sobrio, una vez que terminé de orinar me limpié bien, hasta la última gota de orina, pero noté que mis calzoncitos estaban completamente húmedos, regresé al sofá, ya era muy tarde y no me sentía en condiciones de seguir bebiendo, le expresé que me sentía muy mareada y que era hora de irme a acostar, que le agradecía mucho su compañía, intenté levantarme y tropecé nuevamente con la mesa de centro, otra vez mi salvador estaba allí para evitar que cayera al suelo.
- Disculpa, pero no estás en condiciones de subir las escaleras- lo escuché decir al tiempo que toma mis piernas en sus brazos y me levanta en sus brazos como una recién casada rumbo al lecho nupcial.
No puse resistencia, me encantaba estar en sus fuertes brazos, sentir el calor de su cuerpo, instintivamente me acurruqué en su pecho y pasé un brazo por su cuello, me subió a mi recámara y con delicadeza me depositó en la cama, algo me preguntó, no recuerdo qué, no estaba en condiciones, todo me daba vueltas y tenía los ojos cerrados, estaba empezando a quedarme dormida, me quedé esperando el ruido de mi puerta cerrar, nunca lo escuché, entreabrí los ojos y lo descubrí en la orilla de la cama contemplándome, volví a cerrar los ojos, después de un rato sentí su mano acariciando mi pelo y después rozar la piel de mi mejilla, la suave caricia me ...