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Rentboy
Fecha: 10/08/2024, Categorías: Gays Autor: Ivanvorpatril, Fuente: CuentoRelatos
Tengo diez y ocho años, casi los diez y nueve, y todavía no me he estrenado. Me masturbo de forma compulsiva, todos los días, muchos varias veces, y tengo muchas ganas de probar eso del sexo, quiero hacer el amor con una chica. Me imagino lo que sería tener su cuerpo desnudo con el mío y mi polla dentro de su coñito. Pero siempre he sido un pardillo. Aunque cada vez empieza a importarme menos el que sea una chica o un chico. Estoy empezando a fijarme en los cuerpos de los chicos de mi edad y a veces en gente más mayor, mujeres u hombres. Veo en la piscina o en la disco, cuerpos semi desnudos. Me fijo en sus culos que cogería, amansándolos entre mis manos o en sus pollas que lamería. Empezaba a no pensar en otra cosa que en el sexo y en todo el morbo que me gustaría realizar con alguien. Supongo que eran hormonas revolucionadas. El no haberme estrenado. Pero todo eso se quedaba en la imaginación hasta esta tarde. Hoy me han ofrecido que me dedique a chapero. Así de claro y de duro. Me han dicho que con mi cuerpo y mi cara y además virgen podría ganar mucho dinero. Todo un vicio para cualquiera. Ahora estoy tirado en mi cama, agotado por la experiencia, intentando recordar cada detalle y dejarlos plasmados en mi nuevo móvil. Me lo ha propuesto Juan, un chico que se dedica a ello. Es un conocido de mi madre y yo en la inopia, nunca había relacionado esos dos hechos. Aunque mi madre por su cuerpo no necesitaría pagar por esos servicios la discreción que ...
... ofrece Juan lo compensa. Mueve mucha pasta y no puede atender a todos sus clientes, que consigue por anuncios páginas web y el boca a boca. Haciendo uso de su segundo teléfono móvil mantiene su profesión con una cierta discreción. Lleva buscando otros chicos que le ayuden en su trabajo una temporada. Y se ha acordado del hijo de una de sus clientas suficientemente atractivo según él. Creo que ya se lo ha contado a mi madre y le ha pedido su permiso para proponérmelo. Supongo que como mi madre piensa que no valgo ni para estudiar ni para trabajar, esa podría ser una salida profesional interesante para mi cara bonita y mi cuerpo fibrado. Hemos quedado en un pub oscuro y tranquilo donde imagino que lleva a algunos de sus clientes antes de pasar a mayores. Y así sin paños calientes se ha lanzado. - No sé cómo plantear esto, es la primera vez que busco un ayudante. Así que allá va. Eres un chico guapo y podrías ganar mucho dinero alquilando tu cuerpo para sexo. Tranquilo y déjame terminar antes de rechazarlo de plano. Yo me estaba moviendo nervioso en el cómodo sillón al oír lo que me estaba contando. Pero ni por un momento me había planteado marcharme. Aunque me había sorprendido estaba claro que lo que me contaba me interesaba. - Yo hace tiempo que me dedico a ello y como sabes no me va nada mal. Yo podría pasarte clientes y enseñar como va el tema. ¿Qué te parece la idea? - Me intriga y creo que me excita. Podría probar y ver como me va. - Genial. Te iré ...