Pamela - Relatos Eróticos

Pamela

... lo que me estaba metiendo en la boca… cerré la boca con los dientes para probar un poco mas y sentí claramente como se resbalo fuera de mi

-Ahhh- escuche que exclamaba Don Flavio… Seguro comía lo que me daba a probar- mmmmhh no, no doy- le dije paladeando lo que parecía ser crema

-No te preocupes, no tenemos prisa- me dijo con un tono de voz suave, pero rasposo…

-Ok, otro intento, le pedí… Ahhhhh

-Ok chiquis, pero esta vez no muerdas, solo chupa, por que si no sabrás mi secreto, y quiero que te sea más difícil ¿ok?

-Ok… asentí con los ojos vendados, -Abre- me dijo, Ahhhhhhhh

Ahora sentí algo muy duro, pero cálido también, con un poco de crema de avellana, ¡esta vez no podía equivocarme!

Me introdujo una especie de dedo grande, dos tres veces, cuatro y parecía limpiarse la crema de avellana con mis labios, boca, yo apresurada chupaba lo más que podía, -¿ejjjmmjuuu slorp, quemaa de ajejanaa? Pregunte con la boca llena mientras metía y sacaba un cilindro que estaba embarrado de la crema de avellana, ¿estaba haciendo trampa Don Flavio?, no por favor, solo quería confundirme…

-¿Ji ej qrema de avejana?- Volví a preguntar con la boca llena, Ahh

Chi-chiquis, sigue, sigue… me dijo como si estuviera comiendo igual que yo, ¡que divertido! Saco de nuevo su cosa, y le puso mas crema, que estoy cien por ciento segura que era de avellana, segurísima

-¡Abre la boca chiquis y chupa, chupa con más fuerza!- Me dijo con un tono raro, estoy segura que era por ...

... sentirse descubierto, ¡claro que lo descubriría! ¡Aja! Conteste con la boca abierta nuevamente

Esta vez sentí como como un cilindro de pate ¿saben? Pero sin la envoltura, mucho mas grande y duro, pero muy cálido y embadurnado de crema, solo que al chupar con fuerza durante unos veinte segundos, no lo se tal vez un poquito más, sentía ahogarme un par de veces cuando me llegaba tan hondo don Flavio… Mmmmmm caj coj mmm ejta muy agentroo gon jlavio, le dije como pude, pero el seguía mete y saca para confundirme, y no era tan desagradable chupar el sabor a avellana, cuando de re repente sentí una inyección de un liquido entre tibio y caliente con cierta fuerza que inundo mi garganta sin escalas, fueron dos o tres chorros, ¿que carambas?, ¿Qué me había metido Don Flavio a chupar? Me tomo de la cabeza con sus dos manos y me empujo sutilmente lo que parecía una manga de repostería mientras chorreaba o inyectaba algo salado y acido, el cilindro temblócada chorro que me introdujo…

-Ahhhhhh chiquiiiiiis, que rico la mamas- dijo con esfuerzo, me trague lo que quedaba del liquido por que la crema de avellana prácticamente había desaparecido, mi mano fue hacia mi boca, pegue con la pierna de Don Flavio que estaba literalmente frente a mi, y me limpie los labios

-¿Cómo dice?- pregunte aun paladeando, saboreando ese liquido acido---

-Ahhh nada nada, ¿adivinaste chiquis?

-Mmmm- Me chupe una y otra vez, pero no, -No tengo idea, ¿que me dio?, Don Flaviooooooo- Suplique

Me quito el ...