Cris, mi profesora de inglés (II)
Fecha: 25/10/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: zitro1, Fuente: CuentoRelatos
... pequeño golpe con la empuñadura del látigo en su culo.
Comenzó a gatear, deslizándose por el parquet mientras yo veía sus caderas moverse delante de mí notando un cosquilleo en los genitales. Llegamos al salón y la situé en el centro de la alfombra.
Recorrí su cuerpo con el látigo, dando golpes ocasionales en sus caderas y en su culito. Le ordené levantarse y colocar las manos sobre la mesa.
- No te muevas -Mi mano izquierda hizo círculos alrededor de su cadera y se deslizó hasta el tanga, enganché un dedo debajo de la tela empapada y lo arrastré hacia un lado, exponiendo su coño bien afeitado.
- Ya estás tan mojada, estas bragas están en mi camino.
- Quítalas -suspiró quedándose casi sin aliento ante el tirón en la tela cuando fue arrancada de sus caderas.
- Te haré obedecer, separa bien las piernas e inclínate sobre la mesa.
- Yo… no puedo… no sé… -su tartamudeo era casi incoherente.
- Te tomaré como yo lo desee, llenando cada hueco de cualquier forma que me agrade -Mientras con las suaves hebras de cuero del látigo le frotaba acariciando entre sus labios y haciendo círculos sobre su hinchada abertura.
-¡Por Favor, por favor! -mientras presionaba su culo hacia atrás en contra mío.
- Creo que puedes… y veo que estás lista para implorar por servirme -. Deslicé el mango a su apertura metiéndole un centímetro dentro de su coño y palmeando su expuesto clítoris con el cuero en un suave movimiento.
- ¡Por Favor, por favor! -mordiéndose los ...
... labios.
- ¿Por favor qué? -mientras le entraba un poco más y me detuve.
- Por favor, déjame servirte, eres mi amo.
-Muy buena elección -empujé el suave mango dentro de sus profundidades, aplastando la polla contra sus nalgas.
Continué metiendo el mango adentro y afuera, alternadamente acariciando y abofeteando su clítoris. Su respiración se aceleró, sus brazos, presionando contra la mesa estaban sacudiéndose a medida que se acercaba al clímax. Introduje el mango más allá, acariciando aún más profundamente en su interior, haciéndola jadear hasta que estaba casi gritando de éxtasis. Pero entonces el mango salió.
- ¡No! -Giró para enfrentarse... su cuerpo desnudo, su coño expuesto, los labios recubiertos de sus propios... -No, por favor…
Levante una mano y posé un dedo en los labios para silenciarla.
- Si no puedes cumplir serás castigada -Sus ojos se ampliaron ante mi advertencia.
- Sí amo
- Pon tus manos juntas delante de ti.
Su pecho se oprimió y ella accedió. Até sus muñecas con el extremo de las tiras del látigo. Pasé alrededor de su cuello a fin de que sus manos quedaran al nivel del pecho, tiré hacia abajo entre sus pechos y entre la holgura de sus piernas, sujetando el mango en la parte baja de su espalda. Ella bajó la mirada sobre sí misma y seguro se preguntaba que era aquello. Bajé la mano siguiendo al látigo hasta su coño, donde deslicé tiras entre sus labios hinchados. Su cara ardió cuando presioné hacia atrás, con la cadena del cuello sujeté ...