Una noche con mi cuñada
Fecha: 10/09/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: andresbcz, Fuente: CuentoRelatos
Había contado cómo fue la primera vez que tuve relaciones con mi cuñada, esta es de cómo fue nuestra segunda vez.
Era por el mes de agosto del año pasado, las primas de mi esposa nos invitaron a un paseo de tres días por las playas (una de ellas estaba por graduarse). Mi cuñada Camila no pudo sacar permiso en su trabajo así que se iba a quedar sola. Faltaba una semana para el viaje y tuve que cancelar mi permiso dado que tenía que exponer dar charlas sobre un nuevo proyecto a los clientes de la compañía; como era de esperarse mi esposa se enojó conmigo y no me dejo tocarla durante toda esa semana.
El jueves por la mañana mi esposa, sus primas y la hija de mi cuñada se fueron en avión hasta la playa, pasarían se quedarían hasta el domingo en la mañana. Ese día en la noche llegué tan cansado del trabajo que no me percaté de si Camila estaba o no en su departamento. El viernes por la noche, luego del trabajo, al llegar observé que mi cuñada estaba en su departamento. Sin ánimos para prepararme algo de cenar decidí pedir a domicilio y por no ser descortés le llamé a mi cuñada a preguntarle si deseaba algo de cenar.
Yo: Cuñadita, cómo me le va, voy a pedir algo de cenar ¿desea algo?
Camila: Justo estaba por llamarte a lo mismo.
Yo: Listo, yo invito. En cuento llegue le paso a dejar.
Camila: Vale, nos vemos acá.
Como de costumbre pedí unos mariscos con una botella de vino tinto, para festejar que me fue bien con los nuevos clientes. Pasé a dejarle su pedido a ...
... Camila.
Yo: Cuñadita, aquí esta su pedido; y si se anima también tengo vino, porque voy a festejar lo bien que me fue en el trabajo.
Camila: Venga pase... a menos que vaya a cenar con alguien más, mira que mi hermana me dijo que lo cuide por si acaso. Además, no va a festejar solo, que feo sería eso.
Con la cena se nos acabó el vino y para finalizar brindamos con sendas copas lo último que quedaba; en ese momento le llegaron fotos del viaje que le mandaba su hija. Nos acercamos para ver, luego nos pusimos a revisar las fotos de una fiesta a la que fuimos un mes antes. Me gustan mucho los vestidos que se pone Camila (siempre se compra uno nuevo para cada fiesta), y el de esas fotos no fue la excepción.
Mi esposa me contó que habían ido a comprar el vestido para el grado de su prima, así que le dije a Camila que quería verla con ese vestido, que me hiciera el honor de ser el primero en verla.
Yo: Que tal le queda el vestido que se compró para la graduación?
Camila: Me queda precioso, como siempre (decía mientras reía, con un ego sensual).
Yo: A ver, quiero ver, quiero ser el primero que tenga el privilegio de verla con ese vestido.
Luego de algunas insistencias, accedió a ponerse el vestido. Mientras ella se vestía recordé de cuando tuvimos sexo por primera vez, no sé si Camila también lo recordó, pero la noche no podía ser mejor, los dos solos sin ningún apuro.
Para que terminara de ponerse su vestido tuve que ayudarla con el cierre de la espalda, ...