Cogí a la esposa de mi gerente
Fecha: 12/09/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: AlonsoLima, Fuente: CuentoRelatos
... todo mi semen, lamió mi verga hasta dejarla completamente limpia. Se acostó a mi lado y me dijo “ahora baja tú”.
Y me tocó bajar besando sus senos, sus pezones pequeños, de mujer sin hijos. Su vientre perfecto, sin ningún rollo. Hasta llegar a su concha perfectamente depilada, con unos deliciosos y finos labios. Me sentí en el paraíso lamiendo su concha fina y perfumada. Sentirla gemir mientras mi lengua y mis labios la recorrían me puso nuevamente al palo.
Casi con respeto le dije “señora, dese la vuelta”. Y se dio la vuelta. Separé sus nalgas y me dediqué un buen rato a lamerle un culo limpio y fino, de dama elegante y burguesa. Se puso loca con ello y comenzó a gemir y decir “soy una putita, soy una putita”. Tome valor y rápidamente, antes de darle tiempo para reaccionar, me monte sobre ella y le puse mi verga en la puerta de su culo.
Ella me dijo “no, no, no lo hagas”. Pero estando encima de ella, yo tenía el control absoluto y procedí. Cuando sentí mi verga entrar en su culo, supe que su “no, no, no lo hagas” era protocolar. Entré sin problemas en un culo seguro conocido por muchos hombres.
Me puse loco al poseerla, en un cuarto de hotel pagado por ella, al que llegó con la fina ropa que compraba con el dinero de su esposo, mi gerente. No resistí la tentación y comencé a casi insultarla “es usted una puta, una perra, una cachera, una zorra, una ramera”, ella gemía y decía “si, si, si, eso soy”.
Tomé más valor y le dije “es una perra que le pone los cuernos a su marido don XX,YY”, ella respondió “si, se los pongo, se los pongo con su trabajador”. Llegó y llegué.
Habían pasado ya casi una hora y media. Ella se vistió rápidamente y se fue. Antes de salir me dijo, espera unos 15 minutos y sales. La obedecí. Nos volvimos a encontrar varias veces más, siempre en ese hotel discreto para damas burguesas y putas. Siempre ella pagando la habitación.