1. Sayo - onara. Relato de una atracción


    Fecha: 23/09/2024, Categorías: Erotismo y Amor Autor: elzorro, Fuente: CuentoRelatos

    ... "onara". Sayo es el nombre de mi amiga y "onara" significa "tirarse un pedo" en japonés
    
    - ¿De verdad? qué vergüenza. - dijo Manuel ruborizándose.
    
    - No pasa nada... además, creo que le gustas.
    
    - ¿Tú crees?
    
    - Bueno, ya quedaremos otro día.
    
    ****************
    
    Dos días después, Manuel bajó del tren en una estación rodeada de árboles. El plan era visitar un templo que estaba en lo alto de una montaña.
    
    El americano, la española y la japonesa le recibieron vestidos con ropa deportiva, zapatillas, camisetas de deporte y mochilas con su correspondiente cantimplora. Sayo llevaba el pelo recogido en una coleta y pantalones negros ajustados que le quedaban francamente bien. Sobre su cabeza, un gorro blanco para protegerse del sol.
    
    - ¡Listos! Empezamos.
    
    La ascensión tenía lugar por caminos que alternaban escaleras de piedra y senderos de tierra. Sobre las laderas crecían arbustos y de vez en cuando aparecían pequeñas cascadas que, junto con el sonido de la respiración y el esfuerzo, ponían banda sonora al camino.
    
    - Konnichiwa - dijo Sonia al cruzarse con excursionistas que venían de vuelta.
    
    - Konnichiwa - respondían por turno los aludidos.
    
    Pronto el resto entró en la dinámica del grupo y el saludo se convirtió en algo automático que contribuía a crear una atmósfera única.
    
    - Paramos aquí. - dijo el americano visiblemente fatigado.
    
    - Vale - respondió Manuel tosiendo.
    
    - ¿Bien? - preguntó Sayo interesándose mientras se quitaba el sudor de la frente ...
    ... con la mano.
    
    - Arigato, gracias. - respondió Manuel apoyando sus posaderas sobre una piedra húmeda.
    
    Sayo se sentó a su lado.
    
    - ¿Quieres una toallita? - le ofreció en inglés.
    
    La japonesa asintió agradecida y se secó el sudor. Manuel no pudo evitar fijarse en sus senos durante un instante. Luego, recuperando la compostura la miró y empezó a hablar al mismo tiempo que ella. Ambos pararon y se rieron. Esta vez el chico esperó contemplando el rostro de aquella mujer que cada hora que pasaba le parecía más hermosa. Tendría que aprender a decir "eres bonita" en japonés, aunque después de lo del otro día mejor era estar seguro.
    
    Casi sin querer, mientras esperaban en silencio, Sayo tomó la mano de Manuel para luego retirarla con rapidez y separarse un poco, como temerosa de su osadía. El breve contacto pilló por sorpresa a nuestro protagonista. En ese momento, si no hubiesen estado en medio de un camino transitado, Manual hubiese correspondido a su gesto con una caricia en la mejilla.
    
    - Bueno, bueno. Seguimos no... ya tendréis tiempo para jueguecitos - intervino Sonia.
    
    - ¿Eres mala? - intervino Manuel recuperando la lengua de Cervantes para la ocasión.
    
    Sayo miró sin comprender y Sonia le dijo unas palabras en japonés en las que el español creyó oír una mención a su nombre.
    
    Unos minutos después una señal de madera en forma de flecha indicó que faltaba un kilómetro para llegar. Sonia, que iba primera, avivó el paso. Sayo, empezando a sudar de nuevo la siguió de ...