1. Me froto con la amiga de mi hija


    Fecha: 27/09/2024, Categorías: Confesiones Autor: pagasarri1, Fuente: CuentoRelatos

    ... había podido aguantar sin correrme antes y ella sonrió suavemente se agachó y se puso de rodillas delante de mi mientras se inclinaba y me bajaba el traje de baño. Mi polla como digo estaba completamente dura y para cuando me di cuenta me estaba dando un beso en ella, la iba a decir que me acariciase los huevos también pero para cuando abri la boca ya lo estaba haciendo.
    
    El simple contacto de sus labios en mi rabo me hizo pensar que me iba a correr, respire hondo y la deje que continuase, mi cabeza y mi mente estaban en otro mundo, empezó a chupar suavemente, muchas veces, metiéndosela de repente dentro de la boca, me dijo que era la primera polla que se metían la boca en su vida y según lo dijo se metio mis 16 centímetros hasta la garganta... pude sentir en mi capullo el calor de su garganta y como un animal la agarre la cabeza y comence a apretar mi rabo contra su garganta.
    
    Se que esto dificulta la respiuracion y tras unos pocos segundos la saque...ella respiro fuerte y sonrio como una loca extasiada... con las manos empezó a apretarme los huevos y dijo que la ...
    ... gustaba mucho acariciarlos. La deje que me los acariciara un buen rato, ella jugaba a separarlos uno a un lado y otro a otro, los apretaba suavemente, los frotaba uno con otro, los mordisqueaba... me encantaba ese juego que ella hacia y estuvimos asi un buen rato, ella de rodillas ante mi jugueteando y metiendose en la boca mis huevos suavemente empecé a notar que me corria y la avise la dije -Mirella me voy a correr!! Para mi sorpresa se metio mi polla en la boca y empezo a mamarmela otra vez hasta que me corri.
    
    La lefada fue abundante porque ella siguió chupando y por la comisura de sus labios comenzó a salir lo que ya no le cabía la boca un pequeño chorrillo de leche que finalmente cayó al suelo. Saqué mi polla de su boca, me miro con cara de asustada y continuó chupandomela suavemente como para darmela descanso. En ese momento sonó el portero automático, eran mi hija de Roberto que ya habían comprado los helados. Me subi los pantalones y la limpie la boquita con la mano. Ella me dijo que tenia ganas de más y que queria que se la meta… pero eso ocurrio otro dia... 
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