1. Yajaira se coge a dos hermosas novias, la mía y la suya


    Fecha: 12/10/2024, Categorías: Intercambios Autor: RRuser, Fuente: CuentoRelatos

    ... acariciaba a una mientras se la mamaba a la otra y luego cambiaba, podía oír sus gemidos hasta donde yo estaba, era una escena maravillosa, y esto mientras Yesica y Sara se besaban entre gemidos, parecía que se venían una y otra vez, sin duda ellas sabían muy bien dónde tocarse. Después de mucho rato así y de quién sabe cuantos orgasmos, Yaja se montó sobre Sara, entrecruzaron sus piernas y empezaron un movimiento en el que rozaban sus clítoris, parecía que Yaja la embestía con fuerza y así después de un rato al mismo tiempo gimieron y se fueron quedando quietas poco a poco, disfrutaban su orgasmo. Yesica observaba, esperando su turno. Yaja, como si fuera un semental, se bajó de Sara y se montó en mi novia del mismo modo cruzaron sus piernas y se estuvieron frotando, tratando de agarrarse las nalgas la una a la otra, sin dejar de frotarse y mientras se besaban, llegaron a sus orgasmos. Las tres quedaron tendidas sobre las toallas que tenían sobre el pasto, su respiración agitada, volvía a la normalidad. Yo me masturbaba con esa escena tan hermosa, Sara ya no trataba de cubrirse, a pesar de que yo no les quitaba la mirada de encima, que hermoso trio de cuerpos femeninos tenía delante de mí. Yo también me vine a chorros mientras Sara sonreía viendo como salía disparado mi semen, cuánto disfruté ese orgasmo.
    
    Me metí a la alberca así desnudo y luego de un rato ellas hicieron lo mismo, desnudas. Yesica fue conmigo y me besó tiernamente, abrazada a mi cuello. Yaja y Sara se ...
    ... acariciaban el cuerpo como tratando de lavarse la piel, quitarse el sudor y besándose. Nadamos otro rato y llegó la hora de la comida, preparamos la comida, los cuatro desnudos, aunque ellas envueltas en sus toallas, yo con la verga colgando, Yaja de vez en cuando me daba nalgadas o me apretaba las nalgas, diciéndome que se me veían unas nalgotas bien ricas, a todos nos causaba gracia y nos reíamos. Comimos y tomamos otras cuantas cervezas, después de reposar la comida, ellas nos platicaron que su relación ya era desde mucho antes que entráramos a la escuela, pero los padres de Sara no aceptaban los gustos de su hija, por ello es que mantenían en secreto su relación. Sara nos contó que no tenía problema en que Yaja cogiera con hombres, pues así era cuando la conoció, aunque nos aclaró que a ella no le atraían los hombres, sólo tenía gusto por las mujeres, pero igual y algún día se animaba a probar con un hombre. Cuando dijo esto, yo me puse a su disposición, ella se sonrojó un poco y se rio, dijo gracias y todos nos reímos.
    
    Nos metimos a nadar de nuevo desnudos y jugamos pelota dentro de la alberca, qué hermoso era ver rebotar los pechos de cada una de ellas al saltar para pegarle a la pelota, aunque Yesica no saltaba mucho pues sus pechos le dolían por ser grandes, rebotaban más que los de Sara y Yaja. Yo al tener a esas bellezas así, no tardé en tener la verga parada. Yaja se dio cuenta y se fue acercando a mí, me llevó a una esquina de la alberca y nos comenzamos a besar, ...