1. La vecina de junto


    Fecha: 17/10/2024, Categorías: Lesbianas Autor: Mariel, Fuente: CuentoRelatos

    ... le mamaba el miembro al sujeto, se ahogaba y luego seguía, comencé a masturbarme de inmediato, me la imaginaba sentada en la cama con un pene que no le cabía en la boca.
    
    Después que paró, se empezaron a escuchar sonidos de succión de él y gemidos fuertes de ella, seguramente él le hacía sexo oral, me imaginé su sabor y lo mojada que debía estar, casi grito con ella cuando llegó al orgasmo.
    
    Más sonidos de besos y de repente, los resortes de su colchón como locos, él le estaba dando unas embestidas tan fuertes que se sentían en la pared, estaban gruñendo como locos, gemían y se besaban, podía escuchar como sonaba como charco su vagina, a distintas velocidades y yo estaba que explotaba de excitación.
    
    Cambiaron de posición, ahora se escuchaban como saltos, me imaginé que ella estaba montada arriba y saltaba mientras él besaba sus senos que saltaban como locos al ritmo de ella.
    
    Yo me quité la blusa de la pijama, masajeaba mis pechos bien duros, me penetré la vagina y el ano con los dedos, trataba de no gemir, pero solo escuchando la voz de la vecina casi gritando me volvía loca.
    
    Otro orgasmo de ella, esta vez si alzó mucho la voz, luego un orgasmo de él, también muy sonoro y pronto, un orgasmo mío, lo más silencioso que pude.
    
    Cuando me tranquilice pude escuchar su conversación:
    
    -... Y tus vecinos no se quejan del ruido jajaja
    
    - Jaja espero que no, la vecina de aquí al lado debe haberse despertado, su cama queda justo aquí junto
    
    - Jajaja no, mejor ...
    ... vayamos a su departamento, es igual en este caso
    
    - Ya debe estar acostumbrada, seguro debe escuchas cuando me meto el dedo en las tardes jajaja
    
    - No pues mejor ya invítala a pasar, ¿y tú no escuchas cuando ella se mete los dedos?
    
    - Creo que una vez, pero ella es más callada que yo, que vergüenza mañana que la vea
    
    Siguieron platicando, pero yo me quedé dormida, no la vi en los siguientes días, pero yo decidí que le iba a compensar esa noche.
    
    Un día después de que llegó, puse mi vibrador a máxima potencia y comencé a masturbarme haciendo mucho ruido; comencé desnudándome, me masajeé los pechos y el clítoris con en vibrador, me penetré el ano, luego la vagina, estaba pensando en ella haciéndome el amor, ella lamiendo mi cuerpo, metiendo su lengua entre mis nalgas y metiendo sus dedos en mi vagina, me imaginé como yo la haría gritar succionando su clítoris y mordiendo sus pezones. Tuve varios orgasmos y no limité mis gemidos, quería que ella me escuchara, que estuviéramos a mano... No pensé que eso nos llevaría a un juego perverso y delicioso
    
    Después de ese día, ninguna de las dos tuvo pudor con sus orgasmos, se acostaba a masturbarse sin limitar sonidos; al inicio nos turnábamos, una gemía y la otra escuchaba, pronto, ambas comenzamos masturbarnos al mismo tiempo, yo pegaba mi cuerpo al muro para sentirme cerca de ella, sentir que ella estaba ahí tocándome.
    
    Todo culminó una mañana, yo estaba desayunando antes de irme a la escuela, alguien tocó la puerta, era ...