1. Tremenda culeada a mi esposa borracha


    Fecha: 03/08/2017, Categorías: Incesto Autor: juancaballero, Fuente: CuentoRelatos

    ... me le acerqué y la moví un poco fuerte para saber si estaba bien dormida y al ver que no reaccionaba le desapunté el jean por delante y en la posición en que ella se encontraba, le fue bajando su pantalón lentamente, mientras mi amigo miraba con ojos de angustia porque alguien podía llegar y también con ojos de excitación, por ver como se iba asomando ese monte de carne tan exquisito. Yo me tomaba todo mi tiempo para que él se fuera arrechando más, cuando iba empezando a bajar, se empezó a asomar su hilo dental de color rojo que estaba empezando a metérsele en su rajita del culo, seguí bajándolo hasta que llegué a la rodilla y ahí paré y le hice señas a Juan que se acercara. Entonces él ya tenía la cremallera de su pantalón abierta y estaba cogiéndose la verga, se acercó y la empezó a tocar, le metía el dedo por medio de las piernas que estaban un poco apretadas, porque el pantalón lo tenía hasta las rodillas, pero no me atrevía a quitárselo, porque me daba miedo que llegara alguien y no tuviera tiempo de ponérselos.
    
    Él le metía los dedos y los sacaba y los olía y decía ”umm que rico, sabe a gloria” y se los chupaba, al ver que estaba tan empalmado, le dije que se lo metiera y él se agacho para acostarse encima de ella y lastimosamente se derramó sin siquiera tocarla, y soltó la risa y me dice “uy hermano, es que con ese culo, cualquiera tiene una pequeña eyaculación precoz” y soltó la risa, pero como mi meta era ver una verga en la vagina de mi esposa y estábamos tan ...
    ... borrachos, le dije que se masturbara e hiciera que se le parara otra vez. Pero él hacia todo el esfuerzo posible y nada, entonces yo en medio de la excitación, me le acerqué y se la cogí con la mano y empecé a movérsela, enseguida me la eché a la boca y comencé a mamársela. No lo había hecho nunca, pero me pareció rica esa sensación y uno como hombre sabe cómo mamárselo a otro hombre (yo no soy gay, creo, nunca lo había hecho), le sacaba la cabeza del prepucio y le echaba mucha saliva y después me bajaba hasta los testículos y se los levantaba y le lamia con mucho gusto, después subía y me lo metía todo hasta la garganta y claro, en segundos tuvo una gran erección, al verla tan grande le di unas cuantas mamadas más y le hice señas que se agachara y se lo metiera.
    
    Así lo hizo, entonces yo reaccioné rápido y le metí una almohada alta debajo a ella y le levanté el culito, él la tenía a disposición, lo mejor de todo es que yo le cogí la verga y se la dirigí a la vagina de mi esposa, que estaba mojadita, tal vez por la dedeada que le había dado mi amigo. Cuando estaba en la entrada de la cuquita, ustedes no saben la sensación tan increíble que sentí, esa verga empezó a entrar muy despacio y se fue perdiendo adentro hasta que los testículos no la dejaban entrar más, después él se la sacó y con algún esfuerzo, porque me lo contó después, se lo metió por el culito, él se tomó todo su tiempo y yo estaba muy feliz viendo que mi esposa tan recta, tan seria, tan pulcra, estaba siendo ...