Visitando la casa de mi nueva jefa
Fecha: 08/11/2024,
Categorías:
Lesbianas
Autor: OCTOPUZZX, Fuente: CuentoRelatos
... entiendes?
A Ehh, bueno simplemente no pienso en eso…
S: jaja tranquila Alexa no seas tímida somos mujeres y estamos en confianza hablemos sin timidez.
En ese momento ella me pica el ojo y pasa su lengua por sus labios y me dice,
S: déjame servirte un poco más de vino que veo que ya te acabaste la primera copa.
Trague grueso y estaba fría, por mi cabeza pasaban mil cosas al mismo tiempo. En ese momento Samanta toca mi pierna y me dice relájate que te noto muy tensa. Estamos en confianza.
A: Esstee, no para nada, ¡yo estoy biiieen jeeeffff mm perdón Samanta...!
Empecé a sentirme mareada y a ver borroso en ese momento le comento que no me siento bien, y ella me dijo no te preocupes recuéstate, ¡eso es el estrés...! me quede recostada del mueble hasta que me desmaye, Samanta había colocado algo en mi bebida y me había dopado cuando trajo mi copa desde la cocina ya servida con vino.
Me desperté y estaba en una cama acostada sin ropa interior, atada de pies y manos y con una mordaza en la boca, cuando recupere plenamente la conciencia y logre ver con claridad, allí estaba ella vestida con un traje de cuero negro ajustado al cuerpo al pie de la cama mirándome, empecé a sentir desesperación en mi cuerpo y una angustia incesante recorría todo mi ser, trato de soltarme las manos, pero era imposible, ella mirándome me dice
S: No, no, no… no lo intentes o te lastimaras las muñecas y será peor el dolor para ti cariño.
Yo solo lograba hacer algunos sonidos ...
... de resistencia con la mordaza puesta en la boca mientras ella se reía y me decía hoy te voy hacer mía y disfrutare todo tu hermoso cuerpo.
Mira nada más que bien estas, que sexy cuerpo tienes, me parece increíble que de verdad no estuvieras con nadie durante un año…
Se acerco a mis tetas y empezó a lamer mis pezones y los apretaba con sus labios mientras yo daba gemidos de dolor y muchas cosas pasaban por mi mente de manera acelerada. Ella escuchando lo agitada de mi respiración y algunos sonidos que parecían gritos no distinguibles con la mordaza que ya llevaba puesta yo, me dijo.
S: Tranquila cariño en este cuarto, aunque no lleves mordaza puesta por mucho que grites nadie te escuchara pues estamos en el sótano.
Yo muerta de nervios al escuchar eso; trato de calmarme y cooperar mientras ella sigue chupando mis pezones, bajó a mi vagina y empezó a lamer mi clítoris, mis piernas intentan moverse, pero al estar atadas y abiertas es imposible, ella demostrando ser toda una experta empieza a lamer mi clítoris logrando retorcerme de la excitación y al cabo de poco tiempo estaba teniendo un gran orgasmo humedeciéndome toda; en ese momento me dice:
S: Que rica corrida me has dado cariño me encanta que estés cooperando.
Ella se aleja un poco hasta una mesa en la esquina izquierda de la habitación donde había cosas sobre ella que no lograba distinguir a lo lejos con la poca luz de la habitación. Regreso hasta mi cara y me coloco una máscara tapando mis ojos.
S: Ya ...