El maestro de arte de mi hija
Fecha: 26/11/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Ishtar Flores, Fuente: CuentoRelatos
Hola soy Sandra Verónica, mejor conocida como Ishtar, tu hotwife favorita, la siguiente experiencia sexual que te voy a contar me sucedió hace unos instantes. Si es la primera vez que me lees, déjame contarte brevemente como soy, físicamente una mujer alta mido 174 cm, delgada, vientre plano, cintura de avispa, deliciosas piernas, buen culo, pequeños pero lindo senos, soy hermosa y cabellera larga. Me gusta vestirme provocativamente, usar mini vestidos, muy pegados a mi cuerpo, que resalten mi figura. Tengo un estilo de vestir que combina, la elegancia y la putería. Es decir, soy una puta elegante, me encanta provocar. Adoro usar puti vestidos, sin embargo, en algunas ocasiones uso pantalones, leggins, pero casi siempre, son puti vestidos o mini faldas.
Este último viernes, mi cornudo digo esposo fiel a su costumbre salió con un socio, mis hijas ya estaban en sus departamentos, donde rentan porque entrarían a la Universidad, y este semestre decidieron rentar, aunque en ocasiones vienen a casa. Así que nuevamente estaría sola, no obstante, fiel a mi costumbre quería coger, follarme a un semental, por lo que pacte un encuentro con un macho por citas casuales, estaba programada a las 19 horas en la estación Ermita, por lo que decidí bañarme y arreglarme para salir sin ningún imprevisto. Saliendo de la ducha, abrí mi closet y elegí un clásico y de mis mini vestidos favoritos, un puti vestido entallado color azul rey, que me llegaba a la altura de mis muslos, mi brazo ...
... derecho iba cubierto y la parte izquierda, es decir, el brazo, hombro, parte de mi pecho, descubierto, muy sexi, por consecuencia, la parte izquierda de mi espalda también iba destapada, estaba vez decidí poner un brasier, mi cabello iba suelto, lo acompañe de unas medias color carne de silicona con encaje superior y tacones abiertos de color dorado, finalmente lo acompañe con una mini tanga azul rey.
Estaba por salir, aún faltaba para la cita, pero me gusta salir con anticipación, mi lujuria despertaba y deseaba un semental, fue cuando escuche sonar el timbre, baje para poder abrir mientras me iba poniendo mis aretes y anillos, al abrir, vi a un joven, de 1, 80 aproximadamente, delgado, poco agraciado, moreno, joven maduro de aproximadamente unos 30 años, me dijo: buenas tardes señora estará Ana Gabriela, soy Eduardo, su maestro de arte. Le respondí, Buenas tardes, Gabriela, se encuentra en el departamento que renta hoy no viene, que no le aviso, a lo que el menciono; no. Le dije, permítame hablarle, le marque a mi hija, y me dijo que se le había olvidado avisarle que ahora le mandaría mensaje de WhatsApp, así se lo comunique al maestro. Y este respondió, bueno ni modo, pero ya no tengo pila, quizá por eso no vi el mensaje, sentí pena por él, así que le dije ponga a cargar su celular por lo menos para que tenga pila en lo que llega a su casa, Eduardo, dijo: no señora, me da pena usted ya iba de salida, le dije, no te preocupes aún tengo tiempo.
Finalmente accedió y lo hice ...