1. Volviendo a jugar. La noche en el spa


    Fecha: 29/11/2024, Categorías: Erotismo y Amor Autor: EsposoURU, Fuente: CuentoRelatos

    ... la vagina. El orgasmo que se iba edificando se cortó, me contó que sintió sensaciones encontradas, porque por un lado le gustaba que la penetrara y por otro no quería estar sin el dildo clavado que la llenaba.
    
    Programamos cambiar de posición, saqué mi pene que chorreaba jugos, apagué y saqué el huevo vibrador de su ano, pero me tomé mi tiempo haciéndola desear un poco. Volví a meter y sacar el dildo completamente dos o tres veces más, y le pedí que sujetara sus nalgas hacia arriba, el agujero que dejaba el dildo al salir era enorme, se veían todos sus interiores y se lo comenté, y a ella le gustó porque se sintió más puta aún.
    
    El final se acercaba, faltaba el último sprint, y me acosté boca arriba, era la posición que más le gustaba a ella, tener el control sobre el caballo y cabalgar a su ritmo.
    
    El dildo iba a ser la herramienta del placer, estaba a un costado aún caliente y empapado, el huevo vibrador al alcance de mi mano por si lo necesitaba, el lubricante también destapado en el borde de la cama, pero a ése seguro no lo íbamos a necesitar, nosotros en el centro de la cama King, ella montando la verga de su esposo pero con algunos movimientos se salía del gran agujero que ella tenía. Entonces remplacé mi pene con el dildo, entró en un solo movimiento todo hasta el final, incluso me pareció que el tope ya no lo sentía en mi pubis y solo sentía sus hinchados labios vaginales. Ella de a poco comenzó el movimiento de vaivén y estaba claro que este orgasmo no iba a ...
    ... ser fácil, al dildo le faltaba firmeza y a ella le sobraba espacio, mientras tanto mi pene se frotaba contra su ano cada vez que ella iba hacia adelante y atrás, en el momento que intenté ubicar la cabeza de mi pene en su ano ella no me dejó, y me dijo que ese momento era de ella, que no la interrumpiera.
    
    Continuaba con movimientos de vaivén, algunos momentos a toda velocidad y en otros momentos más suave, donde se retorcía, rotaba sus caderas apretaba y se clavaba el dildo todo lo que podía, yo agarré el huevo, lo encendí y se lo pasé por sus pezones primero, por sus labios de la boca después, ella lo lamió, se lo deslicé por la espalda hasta su ano y jugó allí breves instantes. Lo dejé a un costado prendido y en una rotación de cadera mi pene se desliza hacia su vulva, en tono de broma le pregunté si quería que llamara al vecino, y me dijo que me necesitaba a mi adentro, y como sus deseos son órdenes para mí, aprovechando la completa lubricación de nuestros cuerpos, la dilatación que ella tenía, hice una leve presión y mi pene se deslizó por el costado del dildo en su interior.
    
    Ella gimió, hasta gritó, pero le gustó, hizo presión hacia abajo y de clavó todo el dildo y mi pene hasta los huevos y comienzo a hablarle sucio
    
    “puta”
    
    “comilona”
    
    “te gusta ser jodida por dos pijas”
    
    “me gusta tu concha grande y caliente”
    
    Y entonces explotó, los movimientos se fueron enlenteciendo pero para mi sorpresa continuaron, me pidió que no salga de allí, ella sentía una ...