La hija de mi mejor amigo me hizo una rusa de otro mundo
Fecha: 12/01/2025,
Categorías:
Confesiones
Autor: alexmartin, Fuente: CuentoRelatos
... si pude observar es que aunque no tenía la falda tan corta era suficiente para ver sus muslos, Ángela había crecido muy bien, lo que más me llamó la atención era un enorme saco que tenía puesto, no era el del colegio, le quedaba grande pero pude ver por encima que sus senos eran grandes y se abultaban. Saqué ese pensamiento de la cabeza, aunque cuando Ángela subió la escalera hacia su habitación no pude evitar mirarla subir para ver más de sus muslos.
Así pasaron casi 10 minutos cuando la vi bajar, y me preguntó -Alejandro, no te ha dicho nada mi papá o mi mamá?- le dije que no me habían escrito ni llamado y dijo -ahh. Está bien- luego se acercó a la pequeña mesa frente al sofá donde yo estaba sentado y donde había una nintendo portátil, ella iba a agarrarla pero cuando lo hizo se hizo delante de mi dándome la espalda y se inclinó a recogerla, cuando hizo eso su falda se levantó bastante y alcancé a verle los shorts que tenía debajo, ella se quedó un par de segundos así quieta en esa posición cuando se me ocurrió lo mas arriesgado y no pude controlarme: le rocé mi mano en una de sus piernas.
Ella se quedó quieta por unos segundos, fueron eternos, pensé que había hecho el error de mi vida y sudé en frío, ella volteó a mirarme sin quitarse y me preguntó -¿te gusta mi pierna Alejandro? Le dije que si y le pregunté si podía seguir tocándola. Ella me respondió -No sé, porque si sigues tocando te vas a excitar mucho- dijo eso y me puse aún más nervioso pero seguí el juego y ...
... le dije. -Ángela has crecido mucho estás muy sexy, por qué llevas ese saco tan ancho puesto? Me respondió -es que me da pena con mis compañeros porque tengo las tetas muy grandes.
Con esa respuesta tuve una erección inmediata, se me puso durísimo a imaginarme si en verdad eran tan grandes. Le pregunté qué tan grandes eran y me dijo -el triple de mi mamá- su mamá Sandra era una mujer con unos senos bastante bonitos y redondos así que cuando comparé fue una delicia. Me interrumpió el pensamiento diciéndome -ok, te dejo que me sigas tocando las piernas cuanto quieras, pero solo eso- Entonces le empecé a acariciar las piernas con total libertad con una mano, mientras con la otra me acariciaba mi verga que ya estaba dura por sobre el pantalón, luego cuando estaba muy caliente le pregunté si podía tocar sus tetas y ella poniendo una voz como de niña tierna me dijo -¿tú crees que es correcto que un señor de edad le toque las tetas a una chica pequeña como yo?, sabes qué? Está bien, tócamelas pero por encima de la blusa.
Se quitó ese grueso sacó y quedó solo en una camisa de botones y eran enormes, el bulto que se armaba era grandísimo, los primeros dos botones de esa camisa estaban al extremo estirados, era como si en cualquier momento fueran a explotar, aproveché para apretar esos melones y acariciarlos, mi mano no podía agarrarlos del todo, era una sensación riquísima y mientras tanto ella se mordía un poco los labios y sonreía, que imagen mas excitante. Le abrí la camisa y ...