1. Con el culo roto


    Fecha: 21/01/2025, Categorías: Gays Autor: Einar Cano, Fuente: CuentoRelatos

    ... no, más nooo, mi culo, ayyy.
    
    - Shhh, calla, eres una perrita y las perritas no hablan, ladran.
    
    - Ay, ay, mi culooo.
    
    Me agarró del pelo y tiró violentamente, mientras, su polla entraba y salía de mi culo dolorido.
    
    - Te he dicho que no hables perra, las perras no hablan, ladran, vamos perrita, ladra, ladra.
    
    - Ay, ay.
    
    - Qué ladres te digo.
    
    - Guau guauuu.
    
    - Además, las perras no van vestidas, Atanase, quítale la camiseta.
    
    El gorila agarró la prenda que me quedaba y la desgarró con sus manazas dejándome desnudo.
    
    - Ah ah aaaah.
    
    - Nunca te habían follado así perra, se nota que este coñito de perra necesita polla.
    
    Su miembro seguía incansable, hacía un sonido líquido al entrar y salir debido a la lefa que su amigo había dejado en mi culo, de nuevo sentía el placer que me venía en oleadas, mi polla comenzaba a expulsar líquido preseminal otra vez.
    
    - Oh, oh, ooohhh.
    
    - Vamos perra, córrete, córrete.
    
    - No, no, por favor.
    
    - Sí, siiii.
    
    No lo podía evitar, su polla entraba y salía con violencia, mi esfínter palpitaba y me escocía, mis brazos se doblaron y mi cara tocó el suelo, tuve otro orgasmo.
    
    - Oh, me corro, me corrooo.
    
    - Sí perra, sí, siii.
    
    Metió su polla hasta los huevos y empezó a correrse, notaba las contracciones de su miembro en mi esfínter al eyacular y llenarme de leche las entrañas, permaneció dentro de mí hasta que su pene comenzó a menguar, lo sacó y un chorro de lefa salió con él, quedé allí con la cara en el suelo ...
    ... y el culo en alto, llorando.
    
    - Esto no se puede desaprovechar Negro.
    
    - Claro que no Atanase.
    
    Las manos del gorila me agarraron nuevamente por las caderas, el pánico me recorrió la espina dorsal, intenté levantarme pero el Negro me puso el pie en la cabeza, Atanase se situó sobre mí y metió su enorme polla en mi culo, en esa posición aquel vergajo casi me llega al estómago, a pesar de que lo tenía dilatado y lleno de leche, dolió.
    
    - Más no por favor, os lo suplico, ya está, por favor ya está.
    
    - Cállate perra, te vamos a dar por el culo hasta que nos aburramos.
    
    - Os lo suplico, ya está por favor, ya.
    
    Sollozaba como un crío, el Negro retiró su pie de mi cabeza mientras Atanase me follaba con violencia, sus embestidas eran brutales, su polla era enorme, yo suplicaba, lloraba, pedía a gritos que parase, que sacase aquel tormento de mi culo pero hacía caso omiso, continuaba follándomelo mientras azotaba mis nalgas, oí las risotadas del negro, sentí en la cara un chorro caliente, era su orina, se estaba meando en mi cara.
    
    - Oh dios mío, ooohhh.
    
    Tuve un nuevo orgasmo, brutal, no expulsé lefa porque no tenía nada que expulsar, pero me dejó exhausto, sin fuerzas.
    
    - Me corro maricón, me corro oooh.
    
    Clavó su polla y me soltó otra buena cantidad de leche en las tripas, iba bien servido ese día, tanto por el culo como por la boca, la sacó y yo gatee hasta el tronco del árbol, me senté y apoyé la espalda, de mi culo salía el semen que me habían metido y caía ...
«1...3456»