Repartidor cogelón
Fecha: 13/02/2025,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... culo de voy a dar, puta.
Yo – Ay, me vengo, Paco…me vengo, papi…mmmmmmmmmmmmmmmmmm…
Paco – Vente, putita…vente, güila –me vie riquísimo, me recargué un poco en la barra, él me bajó los pants abajo de las nalgas y me dio una nalgada fuerte-.
Yo – Ay!!
Paco – Pinche culote rico que te cargas, Ingrid –me agarró fuerte las nalgas- ahora híncate y mámela…que también te mueres por hacerlo, vi cómo me veías el paquete todo el tiempo, putita –me di la vuelta con cara de jovencita dominada, él se acariciaba el paquete por encima de su calzón, hice lo mismo- híncate, güila…mámamela, que seguro te encanta mamarla –así lo hice, me hinqué, le mordisqueé la verga sobre el calzón, después se la saqué, de una vez le quité todo de la cintura para abajo, mientras él se la jalaba; se la agarré y se la jalé mientras le daba lamidas desde los güevos hasta la puntita, le daba chupaditas en los testículos- jajaja vaya que lo disfrutas, culera –me agarraba el cabello para poder verme la cara mientras se la mamaba-.
Yo – Mmmmmmmmm…mmmmmmmmm…me encanta mamarla…mmmmmm…
Paco – Eres bien golosa, verdad, cabrona?
Yo – (Sonreí pícaramente; se la jalé un poco mientras lo veía como diciéndole “soy muy puta y luego seguí mamándosela) mmmmmmmm…mmmmmmmm…mmmmm…
Así estuvimos unos minutos, después me dijo que fuéramos a mi cuarto.
Yo – No quieres ir a la sala? –me puso de pie y empezó a agarrarme las nalgas; él ya estaba totalmente desnudo, yo aún como lo recibí-.
Paco – No, quiero ...
... darte rico en tu cama –me habló al oído- quiero metértela en tu cama, quiero cogerte rico, duro…quiero que seas mi puta en tu cama.
Yo – Eres muy cabrón, Paquito.
Paco – Tú eres muy puta, Ingrid. Ándale, llévame a tu cuarto –me empujó con su cuerpo y lo llevé a mi cuarto; mientras subíamos las escaleras sentí su mirada clavada en mis nalgas- qué culo tan rico tienes, no mames.
Yo – Te gusta? Se te antoja? –en cuanto entramos a mi cuarto se me abalanzó, me pegó contra la pared y empezó a besarme y manosearme toscamente, levantándome la playerita, luego se hincó, me bajó los pants y mi calzoncito, me chupó y lengüeteó mi conchita, se puso de pié, su verga chocaba con mi mojada conchita, yo ya la quería adentro, Paco siguió besándome, entonces me rompió la playerita y me la quitó a tirones, dejando mis tetas al aire- oye! –empezó a lamer y chupármelas-.
Paco – A la verga tu playera, quiero saborear tus tetas, putita –después de unos instantes, me cargó, me recargó en la pared y me le metió de un empujón, yo me agarré de donde podía para ayudarle a cargarme-.
Yo – Ay, cabrón…uy, qué rico me la metiste –lo veía a los ojos con carita de “qué rica verga, dame más”-.
Paco – Te gusta, putita? –me embestía fuerte-.
Yo – Sí, papito…cógeme…métemela, Paco…ay, cabrón!
Después de pocos minutos me llevó al silloncito de mi cuarto en la misma posición, se sentó para que ahora lo montara. Me hinqué en el sillón y me senté poco a poco en su verga para metérmela rico; él ...