1. Doble vida


    Fecha: 13/02/2025, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Thorman, Fuente: CuentoRelatos

    ... escaneo visual. Asintió con la cabeza en señal de que le gustaba lo que veía. La volteé y pude ver un culo rotundo de nalgas fuertes, totémico y bien formado; por la parte delantera un coño depilado, el cual Amhed lo sondeo metiendo un dedo; ella se retorció, metió otro dedo y ella ya parecía un corcel encabritado. Al sacar los dedos vi que estaban viscosos.
    
    -Sírvete tú mismo -dijo mirándome Amhed.
    
    Fui directo con tres dedos, entraron como un cuchillo en mantequilla derretida: chorreaba. Vi que Amhed se despelotaba y acto seguido dijo:
    
    -Vamos a ello -dirigiéndose hacia el sofá con un cipotazo empalmado.
    
    A los pocos minutos estábamos los tres en pelota picada en el sofá y ella iba alternando nuestras pollas chupándolas de forma enérgica. La respiración de Ahmed se volvió rápida yo también gozaba mucho, los movimientos bucales eran rápidos, mamaba a uno pajeaba al otro y viceversa; la polla de Amhed era difícil de abarcar, yo tenía una visión espectacular de como intentaba abarcar esa pollaza negra. Las comparaciones eran odiosas entre la mía y la suya. Se oía bel retumbar del sube y baja de la mamada, era una cum aspirada y sonora. Yo gozaba como un poseso y Amhed ya emitía sonidos guturales; estábamos bajo el control de ella. Estábamos esclavizados bajo su dominio.
    
    En un arrebato de virilidad Ahmed se levantó y se colocó tras ella abriéndole las nalgas y estalló con una fuerza volcánica empotrándola mientras seguía chupando mi polla. Ahora si era ella que ...
    ... estaba bajo el yugo de la polla de Amhed, los bombeos eran intensos, profundos y rotundos. Cada embestida la impulsaba a ella hacía adelante lo que hacía que tragara mi polla a fondo. Yo tenía la cara de Amhed justo en frente, su mirada era de loco. Yo flipaba, notaba como mi polla era engullida entera. Me sometía al fuego de su lengua para que ardiese hacía adentro con mi lefa cautiva en mis cojones, me sentía con ganas de correrme. Con una furia inusitada Amhed inició unos bombeos de gran intensidad, ella me seguía mamando de forma frenética, yo estaba bordeando la corrida. Resonaba en toda la estancia el pistoneo de Amhed y el sonido del chapoteo vaginal. Ameh apretó los dientes y emitió un rugido de león herido seguido de cuatro descomunales tacadas. Ella gimió en un ¡¡ Ohhh!! Al mismo tiempo que volvía a engullir mi polla y ahí sí EXPLOTE con una gran lechada dentro de su boca; Amhed aún dio una última convulsión.
    
    Y vino la calma después de la tempestad. Quedamos descansando en bolas todos. Pollas semierectas, ella yacía algo abierta de piernas, por el coño le goteaba semen y la comisura de sus labios restos de mi lefada; la pollaza negra de Amhed semiladeaba. Encendimos unos pitillos.
    
    - ¿Habías estado nunca con un negro? - preguntó Ahmed
    
    - Eres bastante curioso - contestó ella en tono insolente - al acto se levantó, por sus muslos bajaban churretones de legal.
    
    Oyeron la ducha del baño y como hacía gárgaras.
    
    - Follas como una máquina la has petado bien ...