Mi novia Lena (II): La cita muy especial
Fecha: 18/03/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Jano, Fuente: CuentoRelatos
... tanga!
—Oye, y qué le vas a decir a Juan?
—A Juan, nada! Pues que iré a tomar algo con unas amigas. Contigo.
—Eh, a mí no me metas!
—Sí, le diré que mañana por la tarde quedo mi mejor amiga, con Olive!
—Pues vaya!
Mi novia Lena llega a la dirección que le dio el señor K un poco antes de las siete. Ella viste muy elegante, con una chaquetita corta muy lujosa, una blusa blanca muy fina y transparente, sostén de encaje, una falda muy bonita que le llega unos centímetros por debajo de las rodillas, unas media negras hasta medio muslo, zapatos muy elegantes de infinito tacón, un collar de perlas que ha pagado también su jefe y, por supuesto, sin bragas.
—Hola, ya estás aquí, ven, ven! Estás preciosa! – la recibe el señor K vestido muy elegante y ella se sorprende de ver que está más guapo que nunca y más cuando él la acompaña con su mano en las nalgas hacia una mesa donde hay dos caballeros – Miren, les presento a Helena, mi esposa.
—Señora Helena, es un placer! – se levanta el mayor y besa a mi novia en la mejilla.
—Señora Helena! – el más joven le da un par de besos.
Mi novia está sorprendida, pero sigue el juego del señor K y no aclara que no es su esposa. No entiende nada y más cuando el jefe la sienta entre los dos hombres y le oye decir:
—No dirán que les engañé. Es guapa o no es guapa mi mujer?
—Por supuesto!
—Guapísima! – dice el mayor admirando a mi novia.
—Si les parece, tomemos una copa y así la van conociendo.
—Sí, sí. ...
... Nosotros invitamos!
—Oh, son ustedes muy amables! – reconoce mi novia.
Aunque Lena está desilusionada porque creía que estaría a solas con su jefe, la situación no le molesta ya que los tres caballeros son muy amables con ella y se siente toda una señora, como si fuera en realidad la esposa del señor K. Al terminar la copa, el jefe dice:
—Bueno, señores, si lo desean, podemos pasar a la sala privada. Ahí estaremos más cómodos.
—Oh, una sala VIP? – pregunta ingenua mi novia.
—Sí, algo así. Solo para los mejores clientes. Como son ustedes, señor John y señor Óscar.
—Sí, sí, pasemos al privado! – exclama el señor mayor, John por lo que parece.
—Pase usted primero, señora! – dice amablemente el joven, Óscar, y admira el andar sensual de mi novia.
—Oh! – no puede evitar exclamar ella – Pero esto es… Oh! Cuánto lujo!
—Digno de una princesa, Helena! Como eres tú! – contesta el señor K guiñándole un ojo.
—Señor – susurra Lena a su jefe – me gustaría estar sola con usted, aunque estos señores son muy amables y simpáticos.
—Lena, esto hoy no podrá ser. Tú compórtate como mi mujercita y… quizá en otra ocasión… —le contesta al oído y luego, en voz alta – Bueno, señores, mi esposa, como les dije, está aquí para complacerles, verdad, Helena?
—Sí, sí, claro.
—A ver, quítese la chaquetita, señora!
—Ah, sí, sí, hace algo de calor. – responde Lena quitándose la chaquetita. El señor mayor, John, abre unos ojos como platos admirando el pecho de mi novia bajo ...