1. Conversión (1)


    Fecha: 18/04/2025, Categorías: Transexuales Autor: Rick71, Fuente: CuentoRelatos

    ... apoyado en la puerta del departamento, con mi bóxer en las rodillas y viendo como mi sexo entra y sale de la boca de esta increíble mujer. Es más de lo que puedo aguantar y solo alcanzo a avisar en un susurro que voy a terminar, pero ella se pega aún más, chupando con ganas y recibiendo toda mi descarga sin perder una gota. Yo jamás había terminado en la boca de nadie y mi orgasmo reprimido se extendió por un largo minuto. Yo sentía como mi descarga continuaba, sentía cada espasmo con la mezcla de lengua y garganta de esta maravilla de mujer. Y con cada descarga, sentía como los problemas, el miedo, la incertidumbre se iban disolviendo. Mis rodillas van perdiendo su apoyo y ella sigue chupando y manteniendo mi orgasmo un poco más.
    
    Cuando empiezo a sentir mi miembro flácido en su boca, la situación sube a mi cabeza y comienzo a reír. Son los nervios, yo sé que son los nervios, pero no puedo dejar de reír. Ella termina de desvestirme, zapatos, pantalón y bóxer y me lleva hasta un sillón, yo todavía riendo. 45 años y jamás había pagado por sexo. Nunca había salido con una extraña, menos sexo en la primera cita. Y aquí estaba, desnudo en una habitación extraña, sin siquiera saber el nombre de mi salvadora.
    
    Ella desaparece un momento y vuelve con una cerveza que me entrega.
    
    No quiero arruinar tu momento de buen humor, pero primero deberías pagarme.
    
    Tienes razón, discúlpame, es mi primera vez haciendo esto.
    
    Saco dinero de mi billetera y se lo entrego. Ella lo lleva ...
    ... a otra habitación para guardarlo. Uso ese momento para tratar de calmarme. Así que cuando vuelve, ya no estoy riendo. La veo caminar y sentarse a mi lado.
    
    Bueno, parece que es tu primera vez haciendo esto.
    
    Sí, si lo es. Y gracias por ayudarme allá abajo, pensé que me iban a asaltar o algo peor.
    
    Soy Athena, te vi caminando y supe que no perteneces a este barrio, nadie anda por acá sin ser suicida. ¿Eres suicida?
    
    No, la verdad es que no. No quiero morir, solo que tuve una pelea con mi esposa y no estoy pensando muy claramente.
    
    Pobrecito, pero yo voy a poder consolarte.
    
    Oh no, no, yo ya debo irme.
    
    Pero pagaste por estar conmigo toda la noche. Velo así ¿Tienes donde ir?
    
    No, no, la verdad es que no.
    
    Entonces. Mira, tiéndete en el sofá boca abajo y yo te voy a dar un masaje en la espalda.
    
    Dudando y un poco curioso, le obedezco. Me tiendo en el sofá, de pronto sintiéndome vulnerable. En el momento en que empiezo a estar cómodo, siento sus manos sobre mis hombros. Sus manos son mágicas. No puedo creer lo tenso que estoy hasta que ella descubre cada nervio en mi espalda. Los primeros minutos son de revelación, de liberar tensión, de descansar. Pero pronto el masaje empieza a explorar otras sensaciones. Sus manos se mueven suaves sobre mi espalda y mis nalgas, se acercan peligrosamente a mis partes mientras acaricia mis muslos. Y gimo cuando derrama aceite tibio en mi espalda, esparciéndolo con dulzura sobre lugares que no sabía se sentían tan bien. Sus ...
«1234...»