Fany, la cornuda (capítulo 1)
Fecha: 26/06/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Homelander, Fuente: CuentoRelatos
... tranquilizaba pensando eso, tenía el tiempo en contra.
Le entregaba la lata al joven y se sentaba hasta el otro lado del sillón, tenía miedo de sí misma, pensó en ir a masturbarse al baño y dejarse de pendejadas, aclararse la mente, pero a todos nos encanta pararnos en la orilla y ver el abismo, tentar la suerte.
—Bueno, esto definitivamente no se lo diremos — dijo ella nerviosa.
—¿Qué estuve aquí? — preguntó igual de nervioso.
—Sí, ya sabes, mi casa sola hasta la madrugada y todo eso — dijo riendo nerviosa.
—Por fortuna dijo que no quería saber nada — respondió riendo el joven.
—Y que podíamos hacer lo que quisiéramos, nunca dijo que no te trajera aquí — reía falsamente.
—Por fortuna no tendremos que contarle la horrible película — dijo él nervioso.
Mario lo sentía, algo extraño pasaba con Eliza, era algo en la mirada de ella que ahora no se le despegaba, toda la tarde la chica miró a todos lados menos a sus ojos, ahora no miraba a ningún otro lado.
—¡Ya sé! — respondió Eliza riendo — No sé si era peor lo cursi que era o la incómoda escena de sexo — dijo ella, se emocionaba.
—¡Duró como maldita media hora! — respondía él riendo.
—¡Exacto! Y nadie folla así.
—Mmmm ¿Así cómo? — preguntó él honestamente.
—No sé — decía ella, le soltaba la mirada un segundo — Tan ammmm fuerte, apasionado, no sé, solo los actores porno, demasiado falso y fingido — dijo riendo desproporcionadamente, se ponía roja sin darse cuenta.
—Mmmmm no me pareció tan ...
... irreal como en el porno — dijo él con seguridad, ella apretó las cejas.
—¿Tú…? — dijo ella, se detuvo, pero él rio, dejando claro implícitamente que ella podía preguntar — ¿Tú te follas así a Fany? — preguntó sonriendo nerviosa, puta suertuda de mierda.
—Bueno… Quisiera — dijo él nervioso — Pero ella me detiene, le duele a veces por… Le duele un poco — dijo él, silencio de un segundo.
—Por tu vergota.
Dijo ella sin mirarlo, no quería hacerlo, pero lo hizo al final, la boca seca, el coño húmedo, el corazón a tope, él se sorprendió solo un poco, era la mejor amiga de su novia y Fany siempre le decía lo enorme que era, obviamente Eliza lo sabía.
—No es tan grande, pero ella es muy delgada, como tú, emmm o sea — él supo de inmediato que no debió hablarlo en primera persona — Ya sabes mmmm digo de ti porque es proporcional, el tamaño de la cadera y todo eso — dijo él sintiéndose un completo imbécil, no se miraban.
—Yo no te detendría — respondió Eliza, el silencio llenó el lugar — Espera — dijo ella fingiendo rápidamente que contestaba una llamada e iba a su cuarto a responder, huyendo.
Le enviaba rápidamente un mensaje a Julián apenas cerraba la puerta detrás de ella:
“Amor, mis papás no se van aún, mejor llega a las 9 para asegurarnos, dice mi mamá que se van despuesito de las 8”.
Escribió y envió sin pensarlo, ni ella sabía para que quería esas horas extra, no estaba segura, solo sabía que no quería echar a Mario en media hora. Esperó, Julián leía y ...