Perdidos (3): El despertar de los cachorritos de mamá
Fecha: 02/07/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: crisao, Fuente: CuentoRelatos
La confianza entre Judith y su hijo mayor sigue fortaleciéndose y va en aumento. Pero la competencia entre los dos cachorros mayores de Judith, sigue acentuándose.
Quinto mes:
Llevaba 5 días seguido de lluvia en la isla, por tanto, Judith no estaba yendo a bañarse ni al mar, ni al manantial. Solo se higienizaba con agua de lluvia, cómo lo hacían sus hijos.
Jonás cada noche se levantaba a masturbarse, tras manosear a su mamá cuando ella estaba completamente dormida. Pero en cambio Jony se estaba quedando completamente afuera del asunto, al no poder espiarla en el manantial.
Muy esporádicamente Jony encontraba alguna bombacha que Judith dejaba en un valde donde juntaba la ropa para lavar. Y se masturbaba con los olores intimos y femeninos de su mamá.
Pero en aquel quinto día, luego de masturbarse a escondidas de todos, fue a dejar la bombacha rosada en el valde de ropa sucia, y cuando lo estaba haciendo, lo vio Tomás, quien lo vio, le sonrió y le dijo.
-Al parecer acá todos estamos en la misma.
-¿De qué hablas tarado? Le pregunta Jony.
-De que Vos haces lo mismo que Yo. Le responde el chico.
-¿Qué haces? Insiste Jony.
-¿No te pajeaste con la bombacha de mamá? Le pregunta Tomi.
-Bueno… fue por primera vez, ¡desde cuando lo haces Vos? Pregunta Jony.
-Cómo dos o tres semanas. Confiesa Tomi.
La conversación se trunca ahí, cuando de repente entra en el lugar Ronaldo, el más chico de los 4 hermanos.
Pero Jonatán se queda pensando ...
... largamente en lo ocurrido. De cómo su mamá se estaba convirtiendo en la “hembra” de los 4 viriles hermanos atrapados con ella en aquella isla remota.
Tenía que hacer algo al respecto, tenía que hablarlo con Jonás, y quizás pudieran sumarlo a Tomás. Para que se pueda hacer algo entre los tres.
Pero pasaron varios días antes de que Jony encontrara el momento adecuado para hablar del asunto con su hermano mayor. Y en esos días, varias veces lo vio a Tomás con alguna bombacha de Judith en la mano. Incluso él mismo agarró la costumbre de su hermano de masturbarse con los olores y la humedad que mami dejaba en sus bombachas.
Cuando por fin encontró la oportunidad, Jonás se demostró tan sorprendido cómo él. Pero ante la propuesta de hacer algo al respecto, Jonás se demostraba incapaz de tirar alguna idea. Solo repetía una y otra vez que había que tener cuidado de que ella no se diera cuenta de nada.
Asi fueron pasando los días, los hermanos mayores, se turnaban para espiar a mami, y Tomás seguía masturbándose con sus bombachas.
Cierto día Jonás y Judith, dan una larga caminata por la playa, durante la que conversan francamente madre e hijo.
Ellos comenzaron a caminar y charlar. Judith quería que Jonás le hable de sus hermanos, de las cosas que ellos charlaban con él. De cómo veía él cómo estaban tomándolo ellos, toda esta situación que les estaba tocando vivir.
Jonás le contaba que en general el estado de ánimo entre los muchachos era muy bueno, pero que bueno, también ...