Reencuentros calientes
Fecha: 03/07/2025,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: AnaLaura27, Fuente: CuentoRelatos
... a mí, y eso era lo único importante, no quería olvidar esa escena durante mucho tiempo, por lo que me concentraba a ratos en mirarlo fijamente. Hablamos de varios temas, entre ellos de música, a mí me agrada escuchar como habla de ella, de "su novia incondicional". No sé cuánto se prolongó el desayuno, pero a mí me parecía interminable, a veces él pensaba que estaba aburrida, pero es que yo solo deseaba estar con él, y no perder ni un solo segundo sin poder sentirlo, pero por otro lado tenía en mi mente colocado un freno que me impedía imaginar el momento con tranquilidad, me agobiaban los remordimientos de saber que no debía estar ahí por dos razones, y todo aquello, lo que quiero y lo que debo hacer luchaban incansablemente fastidiándome y provocándome un gran enojo conmigo misma por no tener las cosas claras.
Terminó el desayuno y nos marchamos, me preguntó a dónde quería ir, y yo deseaba decirle a dónde quería ir de verdad con él, pero no me anime más que a responderle: —Dónde vos quieras…— Así que el, terminó eligiendo el lugar, me conoce y sabe que moría de ganas de estar con él a solas al igual que él conmigo. Entramos a un hotel con jacuzzi con el motivo de que tenía que bañarse para volver al trabajo, a lo que accedí con dudas y nervios por aquellas cosas que taladraban mi cabeza.
Cuando estuvimos adentro de la habitación no sabía que hacer, el tiempo de no vernos y los recuerdos de aquellos momentos juntos se apoderó de mi y me convirtieron en un manojo de ...
... nervios que me recorrían de pies a cabeza, no sé si se si se dio cuenta de eso, pero hasta mi temperatura corporal cambió, sobre todo en las yemas de los dedos, en las que además sentía un cosquilleo recorrer cada dedo. Trataba de despejar la mente observando mi imagen frente al espejo, como si esa que veía ahí reflejada no fuese yo, de repente me quede mirando los labios de aquella imagen y los vi partidos por el frío, le pedí un labial para seguir distraída haciendo algo, pero optó no solo por darme el dichoso labial, sino por ponérmelo personalmente y repartirlo después muy bien con sus labios, una y otra vez, el alma en ese momento se me escapaba mientras lo hacía, y sentía como un calor recorría todo mi cuerpo alterándome los sentidos, podía haberle dicho que parara, pero es que no deseaba que lo hiciera, no tenía claro hasta donde quería llegar con él, pero tampoco quería cortar esa magia que empezaba a resurgir después de los años.
Pedimos un par de helados que nos llevaron a la habitación y me pidió que lo acompañara a la zona del jacuzzi, lo lleno con agua caliente… —aunque creo que ahí había algo más caliente que solo el agua—, le echó un frasco de jabón para que hiciera espuma, y al entrar en el desnudo me tapo la vista con una toalla que yo misma sujeté con las manos sin saber por qué lo hice, en ese momento no solo deseaba verlo, también deseaba tocarlo, besarlo, acariciarlo. Tomé el helado para que se me enfriaran las ideas, tenía la sangre hirviendo como el ...