Me reencuentro con mi hermana y gozamos como dementes
Fecha: 24/07/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: MikeFed, Fuente: CuentoRelatos
Lula, mi hermana mayor, viajo a EEUU en 2019 para hacer un master en economía en Boston. Graduada con honores en la Facultad, su carrera era meteórica. Antes de viajar, trabajaba en una consultora internacional, que como tenía oficinas en Boston, le ofrecieron trasladarla para que pueda hacer el master y trabajar.
Luego vino el Covid, y por fin, tres años después la volvería a ver en persona. Se iba a quedar en casa, yo feliz. Ah, yo no estudié y me casé a los dieciocho años con Patricio, Pato. Me lleva 10 años, es Ingeniero y Director de una empresa constructora. Por problemas en mis ovarios, no hemos tenido hijos, aunque estamos por empezar un tratamiento. Yo tengo 25 años, voy al gimnasio todos los días y no trabajo.
A las 17 estaba en el aeropuerto esperando a Lula. Cuando cruzo la puerta y me vio, vino corriendo nos abrazamos y las dos lloramos.
-Titi, que hermosa que estas pendeja. Sos una diosa. Me dijo.
-Claro, la reina de las diosas lo dice. Hija de puta, te operaste las tetas. No me dijiste nada.
-Varias cosas no te dije hemanita.
Se dio vuelta y le hizo una seña a una chica que estaba a unos dos metros.
-Titi, te presento a Melanie, mi novia. Dijo Lula casi con vergüenza.
Melanie era una chica terriblemente hermosa, ojos celestes tremendos y un cuerpo escultural.
-Hola Melanie, bienvenida, y un gusto conocerte. Dije y nos dimos un beso en las mejillas.
-Preferí decírtelo personalmente. Si te molesta, no te hagas problema, nos vamos a ...
... un hotel. Dijo mi hermana.
-No seas boluda Lula. Vamos a la camioneta.
En viaje a casa, me contó que con Melanie se conocieron apenas ella llegó a Boston, que era modelo, y que hubo flechazo de inmediato. Dos semanas después de conocerse, se fueron a convivir juntas.
-No me avergüenzo de estar con Melanie, pero tuve miedo de contarte, no sé, que te caiga mal.
-Lula, por favor, lo único que me importa es que estés bien y seas feliz.
-Somos muy felices. Durante el encierro, al contrario que otros, nuestra relación se afianzo. Y ella aprendió castellano, para como ahora, poder integrarse.
El resto del viaje charlamos de sus estudios, me contaron que había una posibilidad de que vinieran a vivir a Buenos Aires si ella conseguía trabajo.
Llegamos a casa, acomodaron sus cosas en el dormitorio de invitados y bajamos a tomar un café. Al rato llegó Pato.
-Lula, vos te fuiste a estudiar o a ponerte tetas y convertirte en una bomba total. Estas hermosa cuñada.
-Sos un cerdo. Pato, hermoso, que alegría verte. Vos sí que estas muy lindo.
-Seguro. ¿No me presentas a tu amiga? Dijo Pato.
-Ehh. Si. Melanie, te presento a Patricio. Pato. Mi cuñado. Pato, ella es mi novia.
-Hola Melanie, un placer conocerte y bienvenida a nuestra casa. Por fin veo que empezas a vivir. Con razón estas radiante, con ese brillo en los ojos. Me pone muy feliz verte así Lula. Dame un abrazo.
-Gracias Pato. Te quiero cuñado. Dijo y lo abrazó con todo. Lula tenía lágrimas en el ...