1. Dime que me quieres.


    Fecha: 02/08/2025, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... que opina. Se va poner a mil.
    
    - No jodas.
    
    - Cállate. No hay nada que puedas hacer. Deja de quejarte.
    
    Bilal apoya su teléfono en la mesita de noche. Quiere seguir grabando. Agarra el móbil de Rebeca y vuelve a girar en torno a ella. En cámara se ve su rostro, intenta mirar hacia atrás. Intenta desatarse. Pero es imposible. Él le empieza a hacer fotos del culo. Se oyen los clicks clicks de la cámara.
    
    - ¿Que coño haces?
    
    El se acerca a su oido y le susurra.
    
    - No voy a repetirlo. He dicho que te calles.
    
    Suenan tonos de llamada. Uno. Dos. Al tercero contesta Marcus.
    
    - ¿Si?
    
    - Que pasa Marcus. ¿Cómo estás?
    
    - Joder debí imaginar que eras tú. ¿Me acabas de enviar ese culazo?
    
    - Claro, adivina de quien.
    
    - Uf que cabrón. ¿Es esa zorrita casada que te estás follando?
    
    - Esa misma.
    
    - Joooooder. Que hijo de puta. Lo que daría por meterla en ese culo.
    
    La cámara de Bilal sigue grabando todo. Ella esta visiblemente nerviosa. Mueve la cabeza intentando quitarse la venda de los ojos. Forcejea con sus ataduras. Es inútil. Marcus se levanta y se dirige hacia la puerta mientras sigue hablando.
    
    - Claro que te gustaría metérsela por el culo. Mira te propongo una cosa…
    
    Abre la puerta y sale de la habitación. Su voz se va alejando y cada vez se hace menos audible. Cuando cierra la puerta ya no se oye nada. Justo antes de eso se escuchan unas últimas palabras.
    
    - Ella está aquí ahora mismo. Atada y con el culo en pompa. Vente tío. Ven a romperle el culo ...
    ... a esta zorra.
    
    La cámara se queda grabando. Se ve a Rebeca respirando fuerte, nerviosa, entrecortado.
    
    - Bilal, joder Bilal donde coño has ido. ¿Qué cojones crees que haces?
    
    Sigue intentando liberarse. Sigue sin poder conseguirlo. Grita desesperada. Llama a Bilal. El tiempo pasa, un minuto. Otro. 5 minutos. Ella se va rindiendo. Llega un momento que deja de luchar y simplemente espera. Su respiración sigue siendo fuerte, nerviosa. 10 minutos. 15. A los 20 minutos se abre la puerta.
    
    - ¿Bilal?
    
    Es Bilal el que entra. Sólo. Pero no dice nada. Se le acerca por detrás.
    
    - ¿Eres tú?
    
    Bilal le abre los cachetes del culo. Escupe en su agujero. Ella gira la cabeza de un lado a otro. Forcejea de nuevo. Grita. Es obvio que no está segura de que sea él el que acaba de entrar. El que le está separando las nalgas para metérsela por detrás. Empieza a metérsela. Despacio pero sin pausa. Le azota. Se la clava hasta el fondo. Ahora la saca despacio. Y le vuelve a meter la polla entera hasta el fondo. En primer plano ella grita. Jadea. Le gusta. Bilal la saca. Y la mete. La saca. Y la mete. Cada vez más rapido. Cada vez más duro. Otra vez y otra vez y otra vez. Hasta el fondo. Tan duro que casi la tira de la silla. Se oyen sus pelotas golpeando sus nalgas con cada embestida. Plop, plop, plop. Mete, saca, mete, saca. Ella ya grita de placer.
    
    - Ahh, ahh joder, joder, voy a correrme, jodeeeerrr…
    
    Se corre largo. Escándoloso. Él se acerca a su oído.
    
    - Te hubiese gustado que ...