1. Seduciendo a mi roomie (Parte 2)


    Fecha: 05/08/2025, Categorías: Gays Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos

    ... nublaba, me encantaba esa cogida, una cogida más suave que cualquiera de mis amantes anteriores, pero más intensa, más llena de pasión, mi verga estaba al tope.
    
    Me estuvo cogiendo por un largo rato y poco a poco, fue embistiéndome más rápido, su verga chocaba contra mi próstata haciéndome gemir y aullar de placer, me apretó más fuerte, ensartándome profundo, succionaba y mordisqueaba el lóbulo de mi oreja, mil sensaciones recorrían mi cuerpo, me sentía tan entregada, puta, cuando su verga llegaba a lo más profundo la movía en forma circular y veía el cielo, mi boca babeaba y gemía sin parar, inconscientemente empecé a mover mi colita también en círculos y arqueé la espalda de tal forma que me empalaba más fácil y profundo, completamente entregado, empezó a gemir, a bufar de placer, unidos en un éxtasis total, nuestros cuerpos temblaban, convulsionaban y exploté entre torrentes de placer que recorrían todo mi cuerpo, mi semen salió disparado con fuerza, chorros de abundante leche que se estrellaban en las sábanas, sin haberme tocado la verga, sentí una descarga desde mi columna vertebral hasta mi culo, haciéndome dar un alarido que seguramente se escuchó en todo el edificio, al tiempo que un líquido lubricaba mi culo, dejándome el culo más húmedo, pensé que Pablo se había corrido en mi culo, pero no fue así, el seguía embistiéndome profundo, taladrando mi culo sin piedad, mi cuerpo convulsionando y retorciéndome sin parar, casi sentí desmayarme de placer, cuando lo ...
    ... escuché decir:
    
    Ayyy, por Dios, que putita, te has corrido como una hembra, eres una putita increíble, ahhh, me voy a correr, aghhh, ya viene, te voy a preñar.
    
    Ahí comprendí que había logrado lo que se llama un orgasmo anal, algo que había escuchado alguna vez, pero pensaba que era un mito, mi culo había lubricado naturalmente, como una hembra, algo impensado, increíble, todo mi cuerpo vibraba y los músculos de mi trasero tenían un espasmo tras otro, ya no podía más, necesitaba que acabara y quería que fuera dentro mío, que me preñara como hembra, su hembra y así se lo pedí.
    
    Aggg, preñame, preñameee, hazme tu hembra, ayyy, vamos, lléname con tu leche.
    
    Dio una última embestida muy profunda al tiempo que daba un alarido estruendoso, su verga se hinchó y explotó en lo más profundo de mis entrañas, chorros de su ardiente néctar inundaron todo mi interior, mezclándose con mis flujos, siguió embistiendo, estocadas profundas, que me hacían delirar, me había cogido por cerca de una hora, sin pausa, mi cuerpo ya pedía un respiro, no me lo daba, siguió algunos minutos más embistiendo hasta que sentí que su verga iba perdiendo dureza y tamaño, su leche escurría por mis nalgas, nuestros cuerpos sudaban, el sudor lubricaba el roce de su cuerpo con el mío, gocé algunos minutos más esa tibia sensación, me sentía tan a gusto con mi macho, en sus brazos, hasta que poco a poco me fui quedando dormido, fundidos en un solo ser, exhausto, la película había terminado también y la habitación ...
«12...6789»