1. La señora Eva


    Fecha: 26/08/2025, Categorías: Sexo con Maduras Autor: jovende35, Fuente: CuentoRelatos

    ... tener el pensamiento de salir corriendo, esta situación me excitó demasiado, removió en mi unas enormes ganas de poseerla, de hacerla mia. Mi miembro viril no tardó en ponerse erecto, y rápidamente me bajé el pantalon y me acerqué a ella. En ese momento, La señora Eva me dijo "Tócame, toca mi vagina con tus manos, acariciame". Lentamente, mis dedos comenzar a palpar su vagina, ella seguía en posición arrollidada a cuatro patas, sobre la cama, y yo desde atrás masajeaba con mis manos su vulva.
    
    La señora Eva no tardó en mojarse, y fue entonces, que me dijo: "has lo que que quieras conmigo", esa situación prendió más fuego en mi, fue como añadirle más combustible a mi fogata interior, sin dudarlo, tomé con la mano derecha a mi pene, el cual se encontraba erecto, erguido, con las venas notorias, impulsadas por la sangre que me hacía sentirme vivo, y poco a poco se lo empecé a introducir, lentamente le meti el falo a la Señora Eva, y para mi sorpresa, la sentí estrecha, a pesar de sus años y embarazos, parecía que tenía años de haberse despedido del sexo. Cuando menos acordé, la Señora Eva ya tenía toda mi vara de carne en su interior, y mientras mis manos sujetaban su cintura y ella permanecia en la posición de cuatro patas, comencé desde atras a descargarle toda mi fuerza, comencé a penetrarla intensamente, a surtirla de mi carne. Desde mi ángulo alcanzaba apreciar comoinclinaba su cabeza del lado y cerraba sus ojos, mientras le introducia intensamente mi pene.
    
    La señora ...
    ... Eva comenzaba a gemir, sus gemidos parecian lloriqueos, pero eran constantes. Seguia metiéndole con fuerza mi pene, en un mete-saca intenso, de repente, la señora Eva lanzó un grito de placer, y sentí como había llegado a su orgasmo, sentí como se mojaba después de esta intensa penetración. Esto me acercó a mi al orgasmo, estaba a punto de eyacular, y entonces veo que ella abre sus ojos y las lágrimas se desprenden, y me atrevo a decirle:"¿estoy a punto de venirme, quiere que me quite?", a lo que ella respondió con un "no" moviendo su cabeza de lado a lado. Sin más tiempo que perder, comencé a mojarle su interior, a descargar mi esperma en ella, todo mi elixir.
    
    Fue una sensación exquisita, absolutamente un paraiso de placer.T odo mi semen se depositaba en la Señora Eva, parecia que mis testiculos se habían vaciado, parecia que hasta la última gota había abonado en ella. Un silencio gobernó por unos minutos aquella habitación, para luego ser interrumpido por unas palabras de la Señora Eva: "Me hiciste sentir viva, dichosa, está rutina de la vida, y mis años me hacen sentir como muerta, y tu has renacido las flores que aún hay en mi". Me dijo que quería tenerme en su vida y que este sería nuestro secreto, que no le juzgara, pero que en felación al aspecto íntimo con su marido, había pasado a segundo o tercer plano, y que ella aún sentía la necesidad de sentir, de recibir una caricia que la hiciera vibrar. Me preparo un café, y juntos bebimos una sabrosa taza, de pronto, sentí ...