1. Los leggings de Karla


    Fecha: 30/08/2025, Categorías: Confesiones Autor: Django2023, Fuente: CuentoRelatos

    ... deje pasar la oportunidad de acariciarle las nalgas. Movía de un lado a otro su lengua, la apreté contra mi arrimandola de las nalgas y lanzó un ligero gemido. Nos separamos, lamentablemente teníamos el tiempo contado, pero me quedé con bastantes ganas de más, Karla se vio al espejo, Ya en un ratito nos vamos, me dijo y salió. Espere un rato a qué se me bajara y salí. La noche se fue calmando y las cosas se había puesto un tanto aburridas, Karla me preguntó que si ya me quería ir y le dije que sí. Pidió un taxi por aplicación. Ya está a cinco me dijo, nuevamente el corazón me empezó a latir al pensar en estar con ella en la parte de atrás del taxi durante el camino a casa. ¿Ya está a 5, que? Dijo mi jefe, El taxi, dijo Karla, cancélalo, yo los llevo, dijo mi jefe y mis expectativas se apaciguaban. No es necesario, dijo Karla, además ya está aquí, dijo y tomo su bolso, nos acompañó por las escaleras y nos abrió la puerta, el auto ya esperaba afuera, Me avisan cuando lleguen, dijo y se dio la vuelta bostezando.
    
    Karla puso mi dirección y ahí nos dirigíamos, revisaba su celular. Nos habíamos quedado bastante pegados, parte de su muslo estaba encima de mi pierna y no pensaba moverlo. Alcance a ver un mensaje en su celular, Me quedé con ganas de darte, decía. Ay, perdón, me dijo riendo acomodándose, bloqueo el celular y lo hizo a un lado. Empezamos una charla casual en la que me confesó que se había quedado con ganas de seguir tomando pero que allá todos ya se estaban ...
    ... durmiendo, lamentablemente en mi casa no se podía, pero había sido día de paga y por la emoción de todo lo que traía encima le perdió el miedo a la cartera, pasábamos por Tlalpan, hoteles, una vinatería, me aventure, ¿Y si la seguimos?, Le dije. ¿En dónde? Dijo riendo, le señale los hoteles por la ventana, acabamos de pasar una vinatería, Ajá, me dijo, Ni te bajas, reí, ¿Cuánto es si nos deja aquí?
    
    El conductor se detuvo. Pagamos y nos dirigimos a la vinatería, compramos cerveza, bastante como para no dormir y nos dirigimos en dirección a un hotel de luces neón por un camino de prostitutas. Pedimos una habitación y subimos por unas escaleras, yo, ella y mis ganas de arrancarle la tanga con la boca, que ahí estaba, frente a mí, bastante cerca entre ese buen par de nalgas. Es aquí, me dijo y abrí, nos pusimos cómodos en la cama, ella encendió un cigarrillo y yo destape una caguama. No recuerdo quien se acercó a quien, pero de repente ya estábamos muslo con muslo ahí en la cama, la tome de la cintura mientras tomaba, se despegó la caguama y río, me le acerque al cuello, se lo empecé a besar, Karla lanzaba pequeños gemidos en mi oreja, me calentó bastante y le acaricie las piernas hasta llegar a su nena que gracias a sus leggings de sentía de maravilla y ella solo gemía y gemía, la bese, me jugueteaba en la boca con su lengua, su mano estaba en mi verga, recorriéndola de un lado a otro con su brazo tatuado y sus largas uñas negras por encima del pantalón. Su celular sonaba una y otra ...