Tomando el autobús a casa - Relatos Eróticos

Tomando el autobús a casa

... ella es una puta y una puta. ¿Por qué no le daríamos un buen polvo?" dijo jerry.
“¿Dónde están los condones?” preguntó Sarah de repente.
Los chicos se rieron. “Sin condones, María folla a pelo. Quiere que nos corramos dentro de ella".
María fue cambiada de polla en polla en el asiento trasero, siempre con otro chico listo para meter su polla en su acogedor coño y su boca buscando constantemente otra polla para chupar. Mientras tanto, los otros chicos hacían que ella les acariciara la polla o jugara con sus grandes tetas.
A María le dieron una polla tras otra durante todo el viaje a casa.
Cuando el autobús entró en su calle, María estaba feliz. Los 17 vendedores se la habían follado y se habían corrido en ella o sobre ella.
El autobús llegó a su casa y se abrió la puerta.
Todavía desnuda, sólo con sus tacones altos, cubierta de sustancia pegajosa con su vagina, goteando con el cabello, su cara y la boca babeando semen sobre sus  tetotas ni noto que Alguien arrojó su vestido, sujetador por una ventana. Se tambaleó en puros tacones y tanga cuando llego su parada para salir dio un show 
Todos los muchachos y el público estaba asomados a las ventanas y vitoreando, abucheando y gritando de cosas mientras el autobús se alejaba lentamente 
"Nos vemos, puta".
"Gracias puta".
"Gracias por la mamada, María".
"María, puta anal".
"Puta chupadora de pollas".
"Disfruta de mi semen dentro de tu coño, puta".
"Cada vez que quieras más polla, llámanos".
 desechada y cansada sin aire María les sonrió y les dijo claro era magnífico con las tetotas todas afuera y con solo sus tacones y tanga negra puesta camino para su casa toda sucia y Sarah le gritó que puerca  es esa pendeja y Maria le respondió si pendeja pero con buenas tetas