Alura: Enzo, el compañero de trabajo de mi marido - Relatos Eróticos

Alura: Enzo, el compañero de trabajo de mi marido

... mamacita, te voy a disfrutar bien rico, cuando andabas balilando en la fiesta de fin de año me hipnotizaste con tus movimientos, tu cuerpo me encanta, ummm esas piernas y eso culo, están para comérselo todo el día... En serio papi? Tu también estás muy guapo y la verdad, tengo que confesarte que me llamaste mucho la atención, tu personalidad y esos brazotes y pectorales que tienes te hacen ver muy sexy, pero yo no pensé que te llegara a gustar, que bueno que me equivoqué porque me encantas, y estoy fascinada de estar contigo aquí así de está manera. Nos comimos prácticamente uno al otro, me besaba con tanta pasión los labios y las mejillas, yo en un momento con ambas manos le abrí su camisa, prácticamente haciendo que bricaran todos los botones, pero no me importó, lo único que yo quería era disfrutar a ese macho que estaba frente a mí, cuando descubrí su pecho, ví que lo tenía bien velludo así como a mi me gusta y empecé a lamerselo, me estaba dando una festín, le recorría toda mi lengua por sus pectorales los cuales se le sentían bien trabajados, en verdad ese hombre me encantaba, había tenido muchos en mi vida, pero él era perfecto, sus brazos también eran bien velludos, y yo a pesar que soy alta, era pequeña comparada con ese hombrezote, él no desaprovechó el tiempo y me quitó la playera, y me cargó tomándome por los muslos para elevarme y que pudiera comermé mis bubis, yo con mis piernas me enredé de su cintura y me retorcía por la forma como me estaba lamiéndo mis ...

... tetas, uuyy que rico papi, me encanta como lo haces...ummm eres una delicia y eres una mujer muy sensual, me encantas. Luego me recostó de forma latera sobre la cama y me despojó de mi shortcito y me dijo lo siguiente. Ummm pero que vulva tan más rica tienes, me encanta carnudita y bien depiladita, que sorpresa me acabo de llevar, eso amerita una buena lamida, y no dejaré pasar está oportunidad.... Sí bebé, lamé mi vulva, ráspala con tu barba, muerdela, haz lo que quieras pero no dejes de darme placer... Claro que te voy a dar lo que te mereces. Y me empezó a comer la vagina, me metía su lengua lo más que podía y me raspaba con su barba mi vulva, me mordizqueaba los pliegues de mis piernas y recorría con su lengua toda mi raja, luego comenzóa darla atención a mi clítoris, uuyy yo sabía que estoy me iba a llevar al cielo, ya que lo estaba haciendo dr forma perfecta, aaaahhh, aahhhhh, mmmmm, mmmm, sí papí, hasta que por fin pude llegar a mi duradero y grandioso primer orgasmo, fue una carga eléctrica que tuve que hizo que tuviera mi primer squirt en mi vida, yo no sabía que era capaz de poder generarlo, pensaba que era una mujer que no podría, pero fue una sensación única poder venirme como fuente. Alura eres una caja de sorpresas, que rico te haz venido... Ahhh, es que me hiciste un buen trabajo... Bueno, entonces debes compensarme. Acto seguido se bajó los pantalones y uuuh que maravilla, una gran verga gorda bien derechita y con buena simetría, no era tan grande como la de Julian ...